Área Arqueológica de Fossa Nera
Una mina de información sobre la historia antigua de la Llanura de Lucca
El área arqueológica de Fossa Nera es un lugar de gran interés histórico porque contiene varios restos de distintas épocas: un poblado de la Edad de Bronce, ruinas de antiguas viviendas de la época etrusca y dos asentamientos romanos. Este importante sitio arqueológico se encuentra en el municipio de Porcari, en una zona conocida como la "Piana delle cento fattorie", situada entre los Montes de Pisa, las Colinas Cerbaie y la Meseta de Pizzorne.
El material arqueológico relacionado con el asentamiento de la Edad del Bronce consiste en vasijas y cuencos de diversas formas, objetos de barro, vasos y ollas. Tampoco faltan artefactos: un broche finamente decorado, un torque (antiguo collar) con decoración, un pequeño cierre de trenza grabado, un fragmento de fíbula y un aro radiado.
En cuanto a la fase de asentamiento etrusco, datada en torno al 500 a.C., se encontraron fragmentos de cerámica de figuras rojas, vestigios de casas etruscas, vasos, restos de ánforas jónico-marsellesas y trozos de piedra gris extraída de los montes Flegreos. Todos estos hallazgos han permitido reconstruir el papel central del asentamiento en el comercio marítimo.
La fase de asentamiento romano, por su parte, se divide en dos secciones denominadas Fossa Nera A y Fossa Nera B.
De la granja romana conocida como Fossa Nera A, que data de entre 170 y 150 a.C., se han reconstruido la planta y las distintas estancias, con un patio central, una fauces (entrada) al este y una zona para prensar la uva y producir vino para Roma. También había un pozo, construido en una segunda fase, que atestigua la actividad agrícola cerealista.
La granja de Fossa Nera B data de finales del periodo republicano (200-175 a.C.). El plano muestra un cuerpo norte de uso residencial y un sector sur con restos de salas destinadas a la producción de vino y establos. Tras una fase de renovación (30 a.C.), fue abandonada hacia el año 100 d.C. La estructura, la posición y los contrafuertes a lo largo de las murallas sugieren que se trataba de una granja fortificada, con una función productiva y militar.
Se han habilitado recorridos para contemplar el sitio, mientras que los hallazgos se conservan en el Museo Nacional de Villa Guinigi, en Lucca, y se exponen en la Exposición Arqueológica Permanente de la biblioteca de Porcari.
