Basílica de San Piero a Grado
Uno de los mejores ejemplos de arquitectura sagrada en Pisa
La Basílica de San Pedro Apóstol, también conocida como San Piero a Grado, se encuentra en el Municipio de Pisa. La iglesia se encuentra en el lugar donde, según la tradición, desembarcó San Pedro durante su viaje del Egeo a Roma. Se construyó en el Siglo XI sobre los restos de un templo paleocristiano del Siglo IV-V, cuyas ruinas aún pueden verse en el interior.
Es un magnífico ejemplo del estilo románico-pisano, construida de piedra de toba y mármol blanco procedente de restos romanos, la iglesia de San Pedro Apóstol está caracterizada por un doble orden de ábsides: tres están posicionados hacia el este y uno solo hacia el oeste, con la puerta principal en la parte lateral septentrional. Las decoraciones externas están formadas por pilastras, arcadas ciegas y 64 cuencos cerámicos de derivación islámica. Estos últimos se conservan ahora en el Museo Nacional de San Mateo de Pisa. En la parte posterior se encuentra el campanario, que fue bombardeado en el 1944 por las tropas nazis en retirada y reconstruido sólo parcialmente.
En el interior, el triple orden está constituido por las grandes columnas con capiteles y arcos decorados de color rojo; sobre los mismos se han representado todos los Pontífices hasta Juan XVII (proclamado Papa en el 1003), con la indicación del nombre de cada uno de ellos. Se trata de un testimonio iconográfico muy precioso, ya que la única otra serie de retratos de los primeros papas se encuentra en Roma, en la Basílica de San Pablo.
Es espléndido el ciclo de frescos sobre la vida de San Pedro, obra del artista de Lucca, Dfeodato Orlandi (Siglo XIV).
