Inaugurada en 2007, la Biblioteca San Giorgio de Pistoia fue diseñada por el estudio Pica Ciamarra de Nápoles y se encuentra en una zona antiguamente ocupada por naves industriales, que en su día formaron parte de la histórica antigua sede de Breda, empresa que desempeñó un papel fundamental en el desarrollo económico y social de Pistoia.
El origen de esta zona se remonta a principios del siglo XX, cuando se construyó cerca de la estación de ferrocarril la Fabbrica San Giorgio, una planta diseñada por el ingeniero Gino Coppedè para la producción de automóviles y vehículos ferroviarios. Con el tiempo, la industria se expandió hasta emplear a miles de trabajadores y se convirtió en un pilar de la economía local. Durante la Segunda Guerra Mundial, entre 1943 y 1944, la fábrica sufrió graves daños por los bombardeos, que afectaron gravemente a la estructura. En los años siguientes, la empresa sufrió varias transformaciones y, en 1973, cambió su nombre por el de Breda Costruzioni Ferroviarie, trasladando la producción a una nueva zona más periférica de la ciudad.
Con cerca de 350.000 volúmenes, espacios acogedores y tecnología punta, la Biblioteca San Giorgio es un lugar de estudio, encuentro y convivencia. Cuenta con numerosas salas de lectura, zonas infantiles, estaciones multimedia y una amplia sección de cómics y novelas gráficas, una de las más surtidas de Italia.
Además del préstamo de libros, la biblioteca acoge eventos culturales, presentaciones de libros, exposiciones y talleres para todas las edades.
Gracias a su filosofía de accesibilidad e inclusión, la Biblioteca San Giorgio no solo es un lugar de cultura, sino también un auténtico punto de referencia para la comunidad, que fomenta el conocimiento y la participación activa. Un lugar donde el conocimiento se entrelaza con el pasado y la vida cotidiana, haciendo de la lectura una experiencia única.