El Jardín Scornabecchi, con su principal atracción, el parque de aventuras "Giardino Sospeso", es un lugar de gran interés desde el punto de vista naturalístico y didáctico. Gestionado por el Municipio de Riparbella, desde hace dos años es también la sede de la Escuela de Enseñanza Media Estatal In Natura del Instituto Integral Griselli de Riparbella.
En el Parque de Aventuras "Il Giardino Sospeso" se han creado recorridos acrobáticos sobre los árboles, para adultos y niños, que consisten en una serie de plataformas fijas y suspendidas, conectadas por pasillos de diferente dificultad y longitud. Los visitantes disponen de arneses, cinturones con ganchos, poleas y cascos para poder desplazarse con total seguridad por los diferentes recorridos del Parque. Además, en el Giardino Sospeso también puedes disfrutar de actividades como el tiro con arco y la escalada en los árboles, alquilar una bicicleta de montaña o relajarte en el comedor o el área de picnic.
Hay numerosos senderos que se pueden realizar libremente a pie, en bicicleta o a caballo en busca de las plantas típicas del "matorral Mediterráneo" como el mirto, el laurel, la encina, el madroño o el lentisco, así como varias especies de orquídeas. La fauna es especialmente rica: los ungulados como el jabalí y el corzo son las especies más fáciles de avistar, pero también el gamo, el puerco espín, el zorro, el tejón, la liebre y la ardilla roja europea.
La avifauna es interesante, con numerosas aves rapaces como lechuzas, mochuelos, cernícalos y buitres, así como pequeñas aves de bosque como pájaros carpinteros, tórtolas y arrendajos. En el Jardín de Scornabecci desde hace años invernan miles de palomas torcaces, que lo utilizan como dormitorio, por lo que en las frías mañanas de invierno, al amanecer, se pueden admirar las espléndidas evoluciones de bandadas compuestas por cientos de palomas torcaces que vuelan hacia las zonas de forrajeo. Por último, recientemente se ha informado y documentado la presencia del lobo.
Desde hace décadas, el Jardín cuenta con un gran recinto destinado a la reproducción de la fauna selvática. De hecho, un área de unas 290 hectáreas está dedicada a la cría de jabalíes. Desde hace algunos años, el espacio vallado se utiliza para realizar excursiones guiadas, destinadas a avistar animales que no son sólo jabalíes, sino también gamos, corzos y diversas especies de aves.