Un pueblo fantasma enterrado bajo 34 millones de metros cúbicos de agua. No es un libro de ciencia ficción, sino la historia real de Fabbriche di Careggine, el pueblo de Garfagnana que en 1946 fue completamente inundado para construir el Lago de Vagli, un embalse artificial propiedad de la empresa de energía Enel que forma parte del dique, explotado para uso hidroeléctrico y como reserva de agua para toda la zona en caso de incendio.
Los habitantes de Fabbriche di Careggine fueron trasladados a una nueva ciudad, Vagli di Sotto, en el promontorio del lago; y el pueblo, cuya construcción data del siglo XII, desapareció para siempre. Hoy en día, el pueblo fantasma sólo resurge del agua cuando el dique se vacía para realizar trabajos de mantenimiento: hasta ahora sólo ha ocurrido cuatro veces, en 1958, 1974, 1983 y 1994.
Cuatro oportunidades para ver Fabbriche di Careggine que emerge con sus casas de piedra todavía en pie, el cementerio, el puente y la iglesia de San Teodoro con el campanario ahora en ruinas. Desde 1994 la empresa de energía no vacía el dique y aún non hay noticias oficiales sobre la próxima fecha de tal acontecimiento.