La Chiesa di San Paolo surgió con la ampliación de una iglesia más antigua, fechable hacia mediados del siglo XIV, y presenta características del románico y del gótico de Pistoia. El portal en forma de cúspide tiene una estatua de San Pablo en la luneta y una estatua de San Jacopo (Santiago apóstol), patrón de Pistoia, en la cúspide superior.
El interior consta de una sola nave y ha estado sometido a muchos cambios estructurales a lo largo de los siglos, sobre todo tras el incendio de 1895. A finales del siglo XX, gracias a una importante restauración, se instalaron las grandes vidrieras del artista de Pistoia Umberto Buscioni, que representan la Conversión de San Pablo, y más tarde, en 2011, las cuatro vidrieras con la división horaria del día, también de Buscioni.