La Torre Guinigi en Lucca es un lugar muy especial, no sólo porque desde su altura de 45 metros se puede admirar un panorama único de todo el centro histórico de la ciudad y las colinas que la rodean, sino porque es un verdadero jardín suspendido en el cielo.
En efecto, en lo alto de la torre se encuentra un verdadero jardín colgante: una gran caja amurallada llena de tierra donde se han plantado siete encinas que se elevan sobre Lucca.La Torre fue construida en la segunda mitad del siglo XIV por los Guinigi, una familia de ricos comerciantes que crearon el jardín como símbolo de renacimiento. Este es uno de los pocos testimonios que quedan de las numerosas torres y campanarios que fueron construidos en Lucca en el siglo XIV: sus alturas eran un elemento de prestigio para las familias más importantes de la ciudad, que competían en la construcción de las mismas.
La Torre también custodia una antigua leyenda: el árbol más alto fue plantado por Paolo Guinigi y se narra que cuando fue capturado por Francesco Sforza y luego encarcelado en el castillo, su muerte fue predicha por el árbol que perdió todas sus hojas.
La Torre Guinigi es un ejemplo típico de la arquitectura románico-gótica de Lucca, construida en ladrillo y decorada con ventanas triforas, cuadriformes, escudos, marcos y placas.