Lago Verde en Lunigiana
Un lugar mágico en constante cambio inmerso en la naturaleza
El Lago Verde de Lunigiana es una cuenca lacustre de unos 500 metros de perímetro que se encuentra a una altitud de 1.100 m.s.n.m., cerca del pueblo de Cervara, en el Municipio de Pontremoli.
El lago, que toma su nombre principalmente del color reflejado de sus aguas, es un lugar realmente mágico y en constante cambio: está rodeado de bosques, inmerso en la flora del Apenino, y aquí es posible pasar agradables jornadas de relax o de excursiones en contacto con la naturaleza.
Alrededor del lago, otra atracción que no hay que perderse es la Cascada de Farfarà, un impresionante salto de agua al que se llega tras unos 45 minutos a pie por la llamada Strada de Agneda.
El Lago
La peculiaridad del Lago Verde es que no tiene ningún arroyo afluente, sino que recibe su suministro de agua principalmente de las precipitaciones atmosféricas y del deflujo superficial a lo largo de las laderas circundantes.
De hecho, el nivel del lago experimenta variaciones estacionales considerables en función de las diferencias en los flujos de entrada de agua y las pérdidas debidas a la infiltración subterránea y las salidas por evaporación.
Para llegar, toma la salida de la autopista de Pontremoli y sigue las indicaciones hacia la localidad Cervara, en el valle del río Verde. Desde allí, es aconsejable continuar a pie por un camino de tierra que sigue el trazado de la Vía de los Abades por unos 5 km.
La Vía de los Abades era una importante vía de comunicación entre Pavía, a través de la abadía de Bobbio, y Pontremoli, y fue una de las principales directrices del Apenino incluso antes de la Vía Francígena.
Aquí, frondosos castañares, un exuberante sotobosque y la presencia esporádica de edificios y ruinas envueltos en la naturaleza, y que simbolizan un pasado rural en ruinas, acompañan el paseo (o el ascenso en 4x4) hasta la cuenca del lago.
Al final de la subida, una formación natural de arenisca forma una barrera natural en la orilla sur del lago.
