Oratorio de los Ángeles Custodios

Una fachada sobria y casi oculta en la Via del Ángel Custodio de Lucca esconde el Oratorio de los Ángeles Custodios, una verdadera joya de estilo barroco donde se pueden apreciar un gran número de importantes obras de arte.

Su origen se remonta al 1638, cuando el arquitecto Vincenzo Paoli construyó este oratorio para la "Congregación de los Ángeles Custodios", una Asociación fundada en el 1627 por Bonaventura Gasparini (1579-1659), oriundo de Lucca, para dar apoyo e instrucción a los numerosos niños desfavorecidos de la ciudad.

En el interior del edificio de una sola nave con bóveda de cañón hay varias pinturas de maestros de Lucca del Siglo XVII: Girolamo Scaglia, Filippo Mannucci, Antonio Franchi, Girolamo Scaglia, Matteo Boselli, Antonio Franchi, F. Dinelli, Pier Filippo Mannucci. Todas las obras se centran en temas relacionados con el rol de los ángeles como intermediarios con Dios.

Algo posteriores son los frescos de Giovanni Domenico Lombardi (1682-1751), que componen un suntuoso proyecto decorativo de gran eficacia y armonía. También hay un órgano del Siglo XVIII, recientemente restaurado, en la zona de la contrafachada.  

A pesar de su entrada aparentemente anónima, el Oratorio es uno de los ejemplos más sorprendentes de la arquitectura religiosa en Lucca.

Una estructura de enorme valor artístico capaz de sorprender a cada visitante.