El Palacio de los Priores en Volterra se encuentra en la plaza homónima. El edificio, iniciado en el 1208, es el palacio comunal más antiguo en Toscana. En esa época se pretendía que fuera demostrar la supremacía y la autonomía del Municipio, por ello se construyó justo al lado del centro del poder episcopal. La estructura se encuentra adyacente a la Catedral.
Durante cierto tiempo fue la residencia de los Priori que gobernaron el lugar, y perdió su uso cuando, en el 1472, los Medici conquistaron Volterra. Los cambios que afectaron a la ciudad no dejaron intacto el palacio, que ha sido modificado en modo aún hoy evidente. Es suficiente observar a los lados los poderosos leones símbolo del dominio de Florencia, y la fachada, con los blasones de colores que recuerdan a aquellos comisionados por los Medici que se sucedieron en el poder. Estos emblemas son, en su mayoría, terracotas provenientes del taller de della Robbia. Sin embargo, hay una peculiaridad del antiguo Municipio que se conserva, y se presenta como un grabado en la piedra que aún se puede ver claramente: se trata de una canna de Volterra, una unidad de medida propia.
En el interior, las paredes llaman inmediatamente la atención con sus numerosos medallones y escudos, pero es en la primera planta donde se entra en la Sala del Municipio, que sigue siendo la sede de las reuniones de la Administración. Decorada en modo exuberante, muestra un fresco de Iacopo di Cione Orcagna; la pintura, del 1383, es probablemente la primera de la escuela florentina realizada en un edificio público de la ciudad. Su sinopia está expuesta en la Sala de la Junta.
Quienes no temen a las alturas pueden subir las escaleras que conducen al campanario, donde se puede disfrutar de una vista panorámica de Volterra y de los valles circundantes.