Dometaia, en el Municipio de Colle Val d'Elsa, en la provincia de Siena, alberga la Necrópolis Etrusca homónima. El parque, inaugurado oficialmente en el 2011, hace visible un amplio espacio sepulcral y está considerado como uno de los más importantes del territorio.
Aunque el yacimiento ya se conocía a finales del Siglo XIX, no fue hasta fines de los años ‘70 y el 2010 cuando se llevaron a cabo excavaciones más extensas, que permitieron descubrir varios sepulturas. Estas, 56 en total, se reparten en un periodo de tiempo que va desde mediados del Siglo VI a.C. hasta los primeros años del Siglo II d.C.
La particular disposición de los hipogeos (estructuras subterráneas) ha llevado a plantear la hipótesis de que su ubicación seguía una antigua ruta comercial de gran importancia que, partiendo de Volterra, habría llegado hasta Dometaia y luego se habría adentrado en Etruria.
La diversificada tipología de las tumbas sugiere la existencia de una sociedad muy diversa, con grandes hipogeos de planta compleja que atestiguan la existencia de formas de poder nobiliario. En cambio, las tumbas más pequeñas son cuadrangulares o circulares y pertenecían a las clases bajas. Son los más extendidos en toda el área de Volterra desde finales del Siglo IV hasta el Siglo I antes de Cristo.
Los hallazgos encontrados en las tumbas, la mayoría de los cuales se conservan en el Museo Arqueológico "Ranuccio Bianchi Bandinelli " de Colle Val d'Elsa y en el Museo Arqueológico Nacional de Siena, incluyen preciados objetos de cerámica pintada en negro y con figuras rojas y otros fragmentos de cerámica ática. Estos elementos parecen confirmar la riqueza de las familias a las que pertenecían las tumbas.