Parroquia Santa Ágata en Scarperia
Insigne vestigio románico en el corazón de Mugello
En el valle del Mugello, a los pies de los Apeninos Toscano-Emilianos, el pueblo medieval de Scarperia y sus alrededores guardan preciosas joyas históricas y religiosas. Entre ellos se encuentra la Parroquia Santa Ágata, uno de los edificios románicos más importantes y conocidos de Mugello.
La parroquia se encuentra en la aldea homónima de Sant'Agata de Mugello y se alza con su arquitectura austera y esencial, llena de historia y arte sacro. Data de poco antes del año 1000 d.C., y probablemente se erigió sobre un edificio sagrado preexistente del Siglo V, como sugieren algunos vestigios encontrados en el suelo.
Presenta una fachada sencilla, que no deja imaginar que en su interior está dividida en tres naves. Se caracteriza por una original solución arquitectónica que apoya el armazón del techo de madera directamente sobre los pilares, lo que da una mayor sensación de amplitud y magnificencia al interior del edificio.
La puerta de entrada está decorada con un dintel de piedra serpentino con una cruz de piedra de Alberese, mientras que el lado izquierdo de la parroquia tiene como elemento decorativo un singular tablero de ajedrez, creado con los mismos materiales.
El campanario en forma de torre cuadrangular se encuentra al final del edificio, no en toda su extensión: los temblores del terremoto del 1542 hicieron que la torre se derrumbara y hoy se puede apreciar mucho más baja que aquella original.
Al cruzar el umbral de la parroquia, se puede observar que en su interior conserva obras de arte y frescos de gran valor artístico. Entre ellos se encuentra el recinto bautismal de piedra formado por paneles con incrustaciones de mármol verde de Prato y la venerada Virgen de las Gracias del pintor florentino Jacopo di Cione.
Junto a la rectoría de la parroquia se encuentra el Centro de Documentación Arqueológica de Santa Ágata, una colección de objetos que documentan la historia del territorio desde la prehistoria hasta la Edad Media. También adyacente al cementerio, el oratorio de la Fraternidad de San Iacopo alberga la preciosa colección de arte sacro de Santa Ágata.
