Ponte Vecchio
El símbolo de Florencia es también la travesía más antigua del río Arno
Ponte Vecchio, o Puente Viejo, es uno de los símbolos de la ciudad de Florencia y también la travesía más antigua del Arno: desde la época romana había un puente en esa posición -la más estrecha del cauce del río en la ciudad-, pero las distintas construcciones antiguas fueron dañadas y destruidas repetidamente por las inundaciones.
Después de haber construido los Lungarni (calles que rodean el curso del río Arno en las ciudades que atraviesa), el puente se construyó nuevamente en el 1345, esta vez con tres pasos, y se considera obra de Taddeo Gaddi o Neri di Fioravante.
En el 1442, para proteger la limpieza y el decoro de la ciudad, la autoridad impuso a los carniceros que colocaran sus tiendas en Ponte Vecchio, las aisló de los palacios del centro y les permitió arrojar los residuos directamente al río. A partir de ese momento, el puente se convirtió en el mercado de la carne, y los carniceros, que más tarde se convirtieron en propietarios de las tiendas, añadieron pequeñas salas suspendidas sobre el cauce del río, que sostenían con postes de madera, para obtener más espacio.
Giorgio Vasari contribuyó de forma decisiva al aspecto actual del Ponte Vecchio en el 1565. Construyó el Corredor Vasari para Cosimo I, la galería que une el Palacio Vecchio con la que era la casa privada de los Medici, Palacio Pitti. El corredor elevado, de aproximadamente un kilómetro de longitud y construido en sólo cinco meses, parte del Palacio Vecchio, pasa por la Galería de los Uffizi, bordea el Lungarno Archibusieri y luego pasa por encima de las tiendas del lado este del puente.
Por último, en el Siglo XVII, se añadieron las trastiendas sostenidas por ménsulas (o "sporti"), que dan al puente su aspecto actual, único en el mundo. Las pescaderías, carnicerías y curtidurías fueron reemplazadas en el 1593, por orden de Ferdinando I, tiendas de orfebres y joyeros debido a que no soportaba los desagradables olores bajo las ventanas del Corredor Vasari, por donde pasaba todos los días.
Incluso hoy en día, en el puente sigue habiendo exclusivamente tiendas de orfebres y joyeros , lo que convierte al Ponte Vecchio en un destino perfecto para un día de compras.
Ponte Vecchio se compone de tres anchos pasos arqueados bajos y fue el primer puente que se construyó de esta manera en Occidente, superando el modelo romano, que preveía muchas arcadas, que en caso de inundación, se obstruían fácilmente.
Una curiosidad: Ponte Vecchio fue el único puente de la ciudad que los alemanes no destruyeron durante la Segunda Guerra Mundial.
Informaciones sobre la accesibilidad: feelflorence.it
