Pontevecchio

Pontevecchio, en la localidad de Bardine, en el Municipio de Fivizzano, es sin duda el yacimiento más importante de Lunigiana entre aquellos descubiertos en doscientos años de estudios sobre las Estatuas Estela. Estas esculturas de piedra con aspecto humanoide estilizado, tenían una función que sigue siendo un misterio hasta nuestros días: se hipótiza de que representaran a antiguas divinidades locales o que fueran símbolos funerarios o monumentos conmemorativos, lo que es seguro es que atestiguan la cultura y la espiritualidad de las antiguas poblaciones que habitaban Lunigiana.

Encontradas en 1905 por los lugareños durante los trabajos en un castañar, las Estatuas Estela de Pontevecchio pertenecen al grupo más antiguo y representan un unicum: nueve menhires perfectamente alineados en lo que fue un punto estratégico a lo largo de los itinerarios prehistóricos de Lunigiana oriental. 
Ocho de estas estatuas estels se encontraron perfectamente intactas, sólo una parcialmente dañada.
Los análisis de carbono 14 han permitido datar el área donde se encontraban los menhires en el IV milenio a.C, además, los estudios realizados sugieren que se trataba de una auténtica "área cultural" situada en un punto de paso obligado de los recorridos prehistóricos. La ceremonia funeraria era probablemente muy compleja y tenía lugar en varios lugares, diferentes e incluso distantes entre sí, por lo que Pontevecchio era una etapa, quizá aquella inicial, mientras que aquella final podría haber sido en una cueva donde se depositaban las cenizas.

De hecho, cerca de Pontevecchio se encuentra la Tecchia de Tenerano, una cavidad natural excavada en la caliza apuana, en la que se han encontrado hallazgos compatibles con esta función, así como huesos humanos, restos de animales y fragmentos de cerámica que indican que ya era frecuentada en el periodo Neolítico.
Este antiguo refugio bajo una roca, descubierto en 1865 por el geólogo de Lunigiana, Iginio Cocchi, está situado a 480 m de altitud y consta de una entrada de unos 43 m de ancho y una sala de unos 100 m de profundidad, 60 m de anchura y unos 20 m de altura, donde, en periodos húmedos, hay un pequeño lago y cuya bóveda está adornada con estalactitas.