Inmersas en la campaña en Valdichiana, las Termas de Montepulciano fueron fundadas en el 1966 para aprovechar las propiedades terapéuticas de las aguas sulfurosas, ricas en sal, bromo y yodo, así como en anhídrido carbónico, presentes en el subsuelo de este territorio.
Gracias a los principios activos del azufre y del bromo, las Termas de Montepulciano ofrecen una amplia gama de tratamientos para las enfermedades respiratorias y artro-reumáticas y para las afecciones de la piel. Además de las terapias termales tradicionales, el centro cuenta con modernos instrumentos de diagnosis y terapéuticos y también se ocupa de medicina deportiva y medicina estética.
Para unas vacaciones lejos del estrés de la rutina, el centro de bienestar de las Termas de Montepulciano ofrece numerosos tratamientos que ayudan a recuperar el equilibrio psicofísico, desde masajes, baños en lodo, hidromasajes, hasta duchas emocionales y el relax en la gruta lunar.