Badia Pozzeveri es una aldea del Municipio de Altopascio que surgió en torno a la Badia San Pietro, una abadía camaldulense que durante siglos fue punto de paso para los peregrinos que recorrían la etapa de la Vía Francígena entre Lucca y Altopascio.
Este pequeño monasterio, uno de los más importantes de Piana di Lucca, está activo desde la Edad Media y se encuentra a un paso de Altopascio y Porcari, en una zona que une los límites de las provincias de Lucca, Pistoia, Pisa y Florencia.
Las primeras menciones de la zona de Badia Pozzeveri se encuentran en documentos históricos correspondientes a los años 952 y 1039, donde se identifica el área situada a orillas del antiguo Pantano de Bientina y en la carretera entre Lucca y el Hospital de Altopascio como "Burgo de Poctieuli".
Hoy en día solo son visibles algunas partes de la estructura medieval de la abadía, pero desde el 2011 el área arqueológica que rodea la antigua iglesia es objeto de un estudio arqueológico permanente y sede de estudios e investigaciones gracias a las Universidades de Pisa y de Ohio. Los resultados de los primeros años de investigación se publicaron en la revista estadounidense "Science" con un amplio reportaje sobre el descubrimiento de un pequeño cementerio que rodeaba el monasterio y sobre el estudio de los hallazgos, que permitió reconstruir una muestra de la vida medieval. En el 2014, el programa de televisión Superquark también realizó un reportaje sobre la reconstrucción del "estilo de vida" de la comunidad medieval que vivía alrededor de la abadía.
En el 2019, en las salas restauradas de la abadía se inauguró el "Hostal Badia", un albergue en la Vía Francígena, a un paso del yacimiento arqueológico, que representa idealmente un puente entre los peregrinos de hoy y los que a lo largo de los siglos recorrieron el sendero hacia Roma.
Gracias también a esta casa de huéspedes, Badia Pozzeveri puede convertirse en un importante punto de unión en un itinerario histórico-arqueológico más amplio que incluya las numerosas e importantes realidades arqueológicos y monumentales de los alrededores, junto con el Municipio de Altopascio. Esta última es conocida desde hace siglos por todos los peregrinos que recorren la Vía Francígena: es el punto de llegada de la etapa 28 (desde Lucca hasta Altopascio) y el punto de partida de la etapa 29 (desde Altopascio hasta San Miniato).