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Fosciandora
Photo © Simone Pacini
Photo © Simone Pacini

Fosciandora

Una tierra fronteriza dominada por montañas y fortalezas, entre Garfagnana y Lucca

El territorio de Fosciandora, pueblo característico de Garfagnana, se extiende en la parte izquierda del valle medio del Serchio, en una posición dominante con un panorama fascinante que incluye el espectáculo de los Alpes Apuanos.
Fosciandora, que siempre ha sido una tierra fronteriza entre las regiones históricas de Garfagnana y Lucca, lo fue aún más en el pasado, atravesando siglos que la vieron a merced de los Señores que se disputaban su territorio, a veces dividiéndolo en diferentes pertenencias, hasta el Siglo XIX. Actualmente, como evidencia de las numerosas vicisitudes, se pueden admirar las fortificaciones y los puestos de avanzada que se construyeron a lo largo del tiempo, por orden de algún poderoso, para defender aldeas y pueblos.

Qué puedes ver en Fosciandora

Tras bordear el río Serchio, se llega a Fosciandora cruzando el puente de Ceserana y subiendo por empinadas calles rodeadas de terrazas.
En las aldeas de Fosciandora, Lupinaria y Treppignana aún se pueden distinguir tramos de los antiguos recintos amurallados, mientras que en la orilla izquierda del río se alza el Fuerte de Ceserana, una estructura con muros construidos con piedra de río, con un camino de ronda, cerrado por dos torres que vigilan la entrada al pueblo y a las colinas situadas encima. La iglesia-castillo del Siglo XII, enriquecido por un elegante ábside y por estatuas de madera de San Andrés y San Jacobo, esculpidas en el Siglo XIV. Esta fortificación resultó ser de gran importancia como refugio durante los períodos de guerra.

Tras bordear el río Serchio, se llega a Fosciandora cruzando el puente de Ceserana y subiendo por empinadas calles rodeadas de terrazas.
En las aldeas de Fosciandora, Lupinaria y Treppignana aún se pueden distinguir tramos de los antiguos recintos amurallados, mientras que en la orilla izquierda del río se alza el Fuerte de Ceserana, una estructura con muros construidos con piedra de río, con un camino de ronda, cerrado por dos torres que vigilan la entrada al pueblo y a las colinas situadas encima. La iglesia-castillo del Siglo XII, enriquecido por un elegante ábside y por estatuas de madera de San Andrés y San Jacobo, esculpidas en el Siglo XIV. Esta fortificación resultó ser de gran importancia como refugio durante los períodos de guerra.

En los alrededores

El territorio de Garfagnana y Valle Medio del Serchio se caracteriza por una perfecta combinación de historia y naturaleza.
A poco más de 10 kilómetros de Fosciandora se encuentra el encantador pueblo medieval de Barga, galardonado con la Bandera Naranja del Touring Club por sus numerosos atractivos culturales y su cuidado centro histórico. La Catedral, a la que se accede por una escalera de piedra, es una visita obligada: ¡la vista panorámica merece la pena!

Otras joyas de la zona son Castelnuovo di Garfagnana y Pieve Fosciana.
Castelnuovo fue el hogar del famoso poeta Ludovico Ariosto, como gobernador, y su símbolo es la Fortaleza Ariostesca, cuya mole trapezoidal domina la plaza principal.
En cambio, el símbolo de Pieve a Fosciana es la Parroquia San Juan Bautista; en el interior de esta hermosa estructura románica, construida hacia el Siglo XI, se pueden admirar importantes obras, como la Anunciación de Andrea de la Robbia, varias pinturas de Pietro Paolini de Lucca y Antonio Consetti de Módena, y una sacristía del Siglo XVI. Otros monumentos que puedes visitar son la Iglesia San Magno, la Torre Sillico y el antiguo molino de agua que aún funciona, perteneciente a la familia Regoli desde hace cinco generaciones. 

El territorio de Garfagnana y Valle Medio del Serchio se caracteriza por una perfecta combinación de historia y naturaleza.
A poco más de 10 kilómetros de Fosciandora se encuentra el encantador pueblo medieval de Barga, galardonado con la Bandera Naranja del Touring Club por sus numerosos atractivos culturales y su cuidado centro histórico. La Catedral, a la que se accede por una escalera de piedra, es una visita obligada: ¡la vista panorámica merece la pena!

Otras joyas de la zona son Castelnuovo di Garfagnana y Pieve Fosciana.
Castelnuovo fue el hogar del famoso poeta Ludovico Ariosto, como gobernador, y su símbolo es la Fortaleza Ariostesca, cuya mole trapezoidal domina la plaza principal.
En cambio, el símbolo de Pieve a Fosciana es la Parroquia San Juan Bautista; en el interior de esta hermosa estructura románica, construida hacia el Siglo XI, se pueden admirar importantes obras, como la Anunciación de Andrea de la Robbia, varias pinturas de Pietro Paolini de Lucca y Antonio Consetti de Módena, y una sacristía del Siglo XVI. Otros monumentos que puedes visitar son la Iglesia San Magno, la Torre Sillico y el antiguo molino de agua que aún funciona, perteneciente a la familia Regoli desde hace cinco generaciones. 

Productos típicos

Al igual que en el resto de Garfagnana, en Fosciandora se pueden degustar platos típicos a base de farro de Garfagnana IGP, un cereal muy antiguo que era la base de la alimentación de las poblaciones Romanas, y de harina de neccio DOP, dos excelencias locales que se utilizan para preparaciones dulces y saladas, como sopas, pasteles o ensaladas.

 

Al igual que en el resto de Garfagnana, en Fosciandora se pueden degustar platos típicos a base de farro de Garfagnana IGP, un cereal muy antiguo que era la base de la alimentación de las poblaciones Romanas, y de harina de neccio DOP, dos excelencias locales que se utilizan para preparaciones dulces y saladas, como sopas, pasteles o ensaladas.

 

Garfagnana y Valle Medio del Serchio

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Una tierra que tiene una historia importante y bosques incontaminados
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