Fosdinovo

El símbolo indiscutible del pueblo es el hermoso Castillo Malaspina que se encuentra en la cima de la montaña y del pueblo, imponiéndose como una de las fortalezas más bellas y mejor conservadas de Lunigiana. El primitivo torreón se remonta al siglo XI y fue ampliado en épocas sucesivas, con torres y torreones defensivos. En el 1340 el Castillo fue cedido por los Nobles de Fosdinovo a Spinetta Malaspina y se convirtió en el centro político y militar de los feudos vinculados a sus familias.
A lo largo de los siglos se construyeron otras poderosas torres en la parte que da al pueblo, mientras que el interior del Castillo se ha transformado en una elegante mansión señorial, con bellas habitaciones con frescos.

En el pueblo también se puede visitar la Parroquia San Remigio, el edificio del siglo XIII está equipado con una instalación original proyectada por los obispos de Luni. Las transformaciones sucesivas, entre las que mencionamos la reconstrucción en el siglo XVI tras un incendio, han alterado la estructura, hasta el actual templo barroco de una sola nave, con presbiterio y coro.

En el interior de la iglesia está la tumba de Galeotto I Malaspina, que fue el segundo Marqués de Fosdinovo.
También merece la pena visitar el Oratorio de la Compañía de los Bianchi, que fue construido después del 1501, año en que fue destruido el oratorio precedente. La fachada de mármol blanco se remonta a la segunda mitad del siglo XVII. En el interior, de forma barroca, se encuentran altares de mármol policromado apoyados en las paredes laterales. En el altar mayor se puede admirar una hermosa estatua de madera de la Virgen del siglo XV.

En los alrededores de Fosdinovo se encuentra el hermoso pueblo fortificado de Ponzanello. Fundado en el siglo XII y ampliado en varias fases históricas, la fortaleza presenta en el recinto amurallado tres portales de acceso a las murallas que se conservan intactos. El fuerte, que surge sobre una colina que domina el pequeño pueblo, parece una residencia fortificada. La posición estratégica del Castillo de Ponzanello sugiere que fue uno de los asentamientos más importantes unidos con los accesos a la costa del Tirreno desde el interior.

Fosdinovo también se descubre desde el punto de vista naturalista, densamente atravesado por caminos aptos para el senderismo y el ciclismo de montaña, es un placer descubrir la exuberante naturaleza de las montañas que rodean el pueblo.
Hay varios paseos que conducen al descubrimiento de bosques, pueblos, parroquias y castillos, pudiendo disfrutar de espléndidos paisajes. Cerca de un tramo de la Vía Francígena Toscana (etapa 24)hay, por ejemplo, una recorrido interesante y fácilmente practicable que va desde Fosdinovo hasta Aulla, pasando por el Castillo de Ponzanello, el pueblo de Treschietto y el pueblo de Bibola.

Es a lo largo de esta recorrido que encontrarás el conmovedor Museo Audiovisual de la Resistencia, dedicado a los trágicos acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial que marcaron este territorio. Una exposición centrada en la "memoria", compuesta por documentos como entrevistas, imágenes de archivo y grabaciones, presentados a través de medios multimedia que establecen una relación interactiva con el visitante. En el museo también se encuentra una fototeca específica sobre la Resistencia Apuana-Luni.

Entre los principales acontecimientos se encuentran aquellos vinculados a acontecimientos y períodos históricos, como la Edad Media, evocados durante el Festival Medieval que se realiza el primer fin de semana de julio, o la Resistencia, a la que se dedica un festival que tiene lugar en primavera y verano.

También los platos típicos de Fosdinovo tienen su momento de gloria anual: el testarolo está dedicado al cuarto fin de semana de julio, mientras que durante la Fiesta de la Castaña, el tercer domingo de octubre, los protagonistas son el Castagnaccio y el Pattone, platos típicos hechos con harina de castaña y agua.

Son las laderas que dan al mar las que nos dan algunos de los productos más valiosos y conocidos de Fosdinovo. Aquí, de hecho, donde las vides, los olivos y el matorral mediterráneo crecen en modo exuberante, se produce un aceite de oliva virgen extra de alta calidad y excelentes vinos, en primer lugar el Vermentino Colli de Luni Bianco DOC.
El territorio de Fosdinovo está involucrado en el Camino del Vino de Colli de Candia y de Lunigiana, que desde Pontremoli desciende hasta Montignoso, permitiéndonos degustar los vinos locales mientras atravesamos el sugestivo paisaje de los Alpes Apuanos.

Los platos típicos tienen como protagonista la harina de castaña. Además del tradicional Castagnaccio, están el Pattone y Ciani - el primero cocinado en hojas de castaña, el segundo entre dos "testi" de hierro - ambos servidos enrollados y rellenos de ricota o crema de avellanas.

No hay que perderse los testaroli, un plato típico de la zona que aquí se preparan en su variante del lugar: se sirven enteros, enrollados como un sándwich, después de ser rellenados con aceite de oliva, pesto, queso pecorino rallado, pero también con salsa de setas, fiambres, queso cremoso, y por supuesto también hay versiones con rellenos dulces.

Saliendo de Fosdinovo y llegando a la aldea de Ponzanello se encuentra la focaccetta, una variante local de la focaccia emiliana, que se acompaña con embutidos, quesos, salsas o crema de avellanas durante la tradicional fiesta de finales de julio.