En una posición especular pero al sur de la Montaña Argentario, se encuentra Porto Ercole, desde el 2004 considerado uno de los pueblos más bellos de Italia. A lo largo de una serie de pasadizos estrechos se llega a la parte más antigua del pueblo, donde se encuentra la Iglesia San Erasmo, que custodia en su interior las tumbas de los gobernantes españoles.
La puerta de entrada está coronada por la Torre del Reloj, donde una inscripción recuerda que el gran Caravaggio vivió allí durante el último período de su vida, huyendo de sus problemas con la ley. Te narramos una curiosidad relacionada con su misteriosa muerte sucedida aquí en el 1610: proveniente desde Nápoles con una falúa (embarcación ligera), el pintor habría llegado ya moribundo en las playas de Feniglia, y luego fue hospitalizado en la Iglesia Sant'Erasmo. Sus restos - que nunca fueron identificados - habrían sido enterrados en el antiguo cementerio en San Sebastiano, donde hoy se encuentra el centro del nuevo pueblo.
Además de sus bellezas naturales, el encanto de Porto Ercole deriva de las imponentes fortalezas españolas que se construyeron en el siglo XVI durante el Presidio de Toscana: El Fuerte Filippo, la Fortaleza y el Fuerte Stella son tres fortificaciones perfectamente conservadas desde las cuales se pueden admirar maravillosas vistas del mar.
En Porto Ercole se puede apreciar el hermoso mar: desde la espléndida playa de Feniglia a las numerosas calas que desde aquí se pueden alcanzar a lo largo de la costa de todo el promontorio.
Una oportunidad para visitar este rincón del paraíso puede ser el Palio Marinero de Argentario que se celebra todos los años en Ferragosto (15 de agosto) desde el 1937. La competencia entre los cuatro barrios del pueblo evoca el fuerte vínculo entre el territorio y el mar.