Continuando nuestro viaje por Lunigiana, territorio que se identifica con el valle del río Magra, en la aldea de Groppoli encontramos el castillo, la villa y la iglesia encargados por la familia Brignole Sale de Génova y construidos según un proyecto de Matteo Vinzoni. En Campoli , hay una estatua estela que vigila el oratorio del pueblo. Una visita sugerida es la Madonna del Monte, desde la que se puede disfrutar de una facinante vista de Lunigiana y, en algunos días claros, del mar.
No dejes de visitar el ya mencionado Montereggio, un verdadero pueblo de libreros, desde el cual, hace aproximadamente un siglo, los libreros partieron con una cesta llena de libros sobre los hombros para vender libros en toda Italia, a veces incluso en España y en Francia. Inicialmente, los libreros de Montereggio eran exclusivamente vendedores ambulantes y vendían en tenderetes (y es precisamente por esta costumbre que se estableció el famoso Premio Bancarella (tenderete)). Hoy en día Montereggio se está convirtiendo en una ciudad completamente dedicada al libro y a la editorial.
Por último, mencionamos el antiquísimo Castillo Malaspina de Castevoli, que fue fundado en el año 1000 por los Este y pasó en el 1195 a los Marqueses Malaspina, que en el 1306 contaron con Dante Alighieri entre sus huéspedes . En el 1416, el edificio fue cedido a la República de Génova, y en el 1465 volvió a los Malaspina. En el 1561, se convirtió en un feudo autónomo bajo el dominio de Tommaso Malaspina. En el 1797, un levantamiento popular puso fin a la Señoría de los Malaspina y por los dos siglos sucesivos el Castillo estuvo abandonado. En el 1990, el pintor y escultor Loris Nelson Ricci, junto con su esposa, la suiza Erika H. End, reconstruyeron elantiguo castillo a partir de sus ruinas. Después de ocho años de impresionante restauración, el "nuevo" Castillo fue inaugurado en el 1998. En su interior se pueden apreciar esculturas, pinturas, diseños y proyectos arquitectónicos.