Ve al contenido principal

Sansepolcro

Al pied de los Apeninos toscanos, el histórico pueblo donde ha nacido Piero della Francesca

Sansepolcro está situado a los pies del último tramo de los Apeninos Toscanos y domina Valtiberina que se abre en un vasto anfiteatro de montañas y colinas bordeado por el Alpe de la Luna, Massa Trabaria, las colinas de la cercana Umbría, las montañas de Aretino y el Alpe de Catenaia. El territorio de Sansepolcro está rodeado de suaves colinas verdes con extensiones de tabaco.

La tradición atribuye a Sansepolcro un origen mítico. Gracias al trabajo de dos santos peregrinos, Arcano y Egidio que, en su camino de regreso de la Tierra Santa, se detuvieron en este valle para construir una capilla para custodiar las Sacras Reliquias. 
Con el paso de los años, alrededor de esta capilla se construyó la catedral dedicada a San Juan y todo a su alrededor se formó el pueblo que por esta misma razón fue llamado "del Santo Sepolcro".

Qué ver en Sansepolcro

Encerrada por una muralla bordeada por las cañoneras de Bernardo Buontalenti y la valiosa Fortaleza de Giuliano da Sangallo, el centro histórico es una verdadera joya que ha conservado hasta hoy las características de un auténtico centro y profundamente unido al más grande de sus hijos: Piero della Francesca.
El artista, que se firmaba a sí mismo Pietro dal Borgo, inmortalizó a Sansepolcro en muchas de sus obras, exaltando sus características típicas. 
No hay que perderse la visita al Museo Cívico que alberga el famoso Políptico de la Misericordia y el gran fresco de la Resurrección, la obra considerada como una de las más representativas del artista.

Otros museos para visitar son el Museo Aboca y el Museo de la Vidriera Antigua.

En la Catedral de Sansepolcro se conserva el Santo Rostro, un crucifijo de madera de la época carolingia.
Otras iglesias que puedes visitar son  Santa Marta, Santa María de las Gracias, San Francisco, San Roque y  San Antonio Abad, que junto con la Fortaleza de los Medici y la Casa de Piero della Francesca, contribuyen a transformar a Sansepolcro en una meta de gran valor para los amantes de las ciudades de arte.

Encerrada por una muralla bordeada por las cañoneras de Bernardo Buontalenti y la valiosa Fortaleza de Giuliano da Sangallo, el centro histórico es una verdadera joya que ha conservado hasta hoy las características de un auténtico centro y profundamente unido al más grande de sus hijos: Piero della Francesca.
El artista, que se firmaba a sí mismo Pietro dal Borgo, inmortalizó a Sansepolcro en muchas de sus obras, exaltando sus características típicas. 
No hay que perderse la visita al Museo Cívico que alberga el famoso Políptico de la Misericordia y el gran fresco de la Resurrección, la obra considerada como una de las más representativas del artista.

Otros museos para visitar son el Museo Aboca y el Museo de la Vidriera Antigua.

En la Catedral de Sansepolcro se conserva el Santo Rostro, un crucifijo de madera de la época carolingia.
Otras iglesias que puedes visitar son  Santa Marta, Santa María de las Gracias, San Francisco, San Roque y  San Antonio Abad, que junto con la Fortaleza de los Medici y la Casa de Piero della Francesca, contribuyen a transformar a Sansepolcro en una meta de gran valor para los amantes de las ciudades de arte.

En los alrededores

Valtiberina Toscana es un lugar único y extraordinario para seguir los pasos de San Francisco, entre ermitas, iglesias, monasterios y parroquias. 

A sólo 6 km de la ciudad puedes visitar la Ermita de Montecasale, un lugar de importancia primordial para la espiritualidad y la tradición franciscana. 

Cerca de Sansepolcro se encuentra el pequeño pueblo medieval de Anghiari, que fue el escenario de la famosa Batalla de Anghiari, el 29 de junio de 1440, que más tarde se convirtió en un fresco de Leonardo da Vinci.

En el territorio del valle encontramos también el pueblo de Monterchi, donde se conserva el fresco de la Virgen del Parto, una de las más altas expresiones del Renacimiento realizado por Piero della Francesca. 

También vale la pena visitar el pueblo de Caprese Michelangelo, que lleva en su nombre la memoria del famoso Michelangelo Buonarroti, que nació aquí el 6 de marzo de 1475. Te aconsejamos visitar la casa donde nació, que actualmente es el Museo Michelangelo.

Valtiberina Toscana es un lugar único y extraordinario para seguir los pasos de San Francisco, entre ermitas, iglesias, monasterios y parroquias. 

A sólo 6 km de la ciudad puedes visitar la Ermita de Montecasale, un lugar de importancia primordial para la espiritualidad y la tradición franciscana. 

Cerca de Sansepolcro se encuentra el pequeño pueblo medieval de Anghiari, que fue el escenario de la famosa Batalla de Anghiari, el 29 de junio de 1440, que más tarde se convirtió en un fresco de Leonardo da Vinci.

En el territorio del valle encontramos también el pueblo de Monterchi, donde se conserva el fresco de la Virgen del Parto, una de las más altas expresiones del Renacimiento realizado por Piero della Francesca. 

También vale la pena visitar el pueblo de Caprese Michelangelo, que lleva en su nombre la memoria del famoso Michelangelo Buonarroti, que nació aquí el 6 de marzo de 1475. Te aconsejamos visitar la casa donde nació, que actualmente es el Museo Michelangelo.

Eventos

Sansepolcro es la ciudad del Palio de la Balestra. El segundo domingo de septiembre, los ballesteros del pueblo renuevan el desafío con sus rivales de Gubbio. La ciudad revive fascinantes iniciativas culturales donde participan todas las asociaciones históricas de la ciudad, con desafíos, espectáculos musicales, danzas y desfiles históricos para dar vida a una de las evocaciones históricas más sugestivas de Valtiberina.

Septiembre el mes de la ciudad por excelencia, no sólo por el Palio, sino también por la Bienal de Arte de Orfebrería y la Bienal del Encaje, que valorizan dos importantes tradiciones locales que combinan el arte y la artesanía local. No te pierdas, siempre en este período, el Banquete Renacentista, una cena de platos renacentistas en el pintoresco marco del Claustro de Santa Chiara.

Sansepolcro es la ciudad del Palio de la Balestra. El segundo domingo de septiembre, los ballesteros del pueblo renuevan el desafío con sus rivales de Gubbio. La ciudad revive fascinantes iniciativas culturales donde participan todas las asociaciones históricas de la ciudad, con desafíos, espectáculos musicales, danzas y desfiles históricos para dar vida a una de las evocaciones históricas más sugestivas de Valtiberina.

Septiembre el mes de la ciudad por excelencia, no sólo por el Palio, sino también por la Bienal de Arte de Orfebrería y la Bienal del Encaje, que valorizan dos importantes tradiciones locales que combinan el arte y la artesanía local. No te pierdas, siempre en este período, el Banquete Renacentista, una cena de platos renacentistas en el pintoresco marco del Claustro de Santa Chiara.

Tradiciones y productos típicos

Sansepolcro, así como toda la región de Valtiberina, cuenta con tradiciones artesanales del más alto nivel como la elaboración del vidrio, la madera, la piedra, la restauración, el hierro forjado y la producción del famoso cigarro toscano. 
Todo lo que hay que descubrir es la original y refinada técnica del encaje de majaderos o de bolillos, transmitida a través de generaciones.

En toda la zona se puede degustar lo mejor de la cocina toscana a base de setas, trufas, castañas y buen vino.

Sansepolcro, así como toda la región de Valtiberina, cuenta con tradiciones artesanales del más alto nivel como la elaboración del vidrio, la madera, la piedra, la restauración, el hierro forjado y la producción del famoso cigarro toscano. 
Todo lo que hay que descubrir es la original y refinada técnica del encaje de majaderos o de bolillos, transmitida a través de generaciones.

En toda la zona se puede degustar lo mejor de la cocina toscana a base de setas, trufas, castañas y buen vino.

En los alrededores

Lugares que no debes perderte, itinerarios por etapas, eventos y consejos para tu viaje

Valtiberina Toscana

Valtiberina Toscana
Patria de los maestros del Renacimiento, desde Michelangelo hasta Piero della Francesca.
Ver más