Vaglia

Vaglia es conocida por su espléndido Parque Pratolino de Villa Demidoff, que surgió sobre las ruinas de la antigua Villa de los Medici de Pratolino, demolida en el 1822. Una vez  que adquirió la finca, la familia de origen ruso, Demidoff, utilizó como nueva villa lo que era el antiguo edificio de los pajes, ampliándolo y reconstruyéndolo. El parque, aunque ampliamente modificado y despojado a lo largo de los siglos, es uno de los más bellos en Toscana, y probablemente el más importante entre aquellos de estilo inglés. En el jardín se destaca el famoso Coloso de los Apeninos de Giambologna, que es una estatua que domina un lago y que no deja de sorprender quienes tienen la oportunidad de admirarla - y es precisamente el caso di hacerlo, considerando que el acceso al parque de Pratolino ¡es gratuito!

En Vaglia también vale la pena visitar la Iglesia San Pietro , cuya presencia se menciona en un documento del 983, que custodia algunas valiosas pinturas del Siglo XVII, la iglesia medieval San Romolo y la antigua Parroquia dedicada a San Cresci.

Además, el pueblo es una etapa del Recorrido Circular del Renacimiento, un trayecto admirable desde el punto de vista paisajístico.

En el área de Florencia hay muchas residencias, además de aquella de Vaglia, que recuerdan a grandes personajes del pasado. En efecto, el territorio conserva maravillosas villas de los Medici, patrimonio de UNESCO, como la bellísima Villa del Castello, restaurada por Vasari y rodeada por un hermoso jardín diseñado por Tribolo, sede de la Accademia della Crusca.

En Florencia se puede visitar la Villa de los Medici de Petraia, transformada según un proyecto de Buontalenti, que había recibido el encargo de Ferdinando I, mientras que a pocos pasos de Fiesole se puede admirar la Villa de los Medici, también conocida como Belcanto o Palagio de Fiesole, comisionada por Cosimo il Vecchio a Michelozzo.

Hablando de residencias de época, destaca en Lastra a Signa la Villa Bellosguardo, residencia del tenor Enrico Caruso y sede del museo dedicado a él.

Uno de los acontecimientos recurrentes en el territorio es el característico viaje en el Tren de la Befana: las antiguas locomotoras de vapor, con motivo de la Epifanía, parten de la estación ferroviaria de Santa Maria Novella de Florencia y llegan a Pontassieve, San Piero a Sieve y Vaglia. ¡Es una experiencia única que encanta a adultos y niños por igual!

Por último, en la aldea de Bivigliano, en septiembre, se celebra la típica Feria de la schiacciata (focaccia), que celebra uno de los productos simbólicos del lugar, tanto en versión dulce como salada.

La cocina de Vaglia refleja las tradiciones gastronómicas y vinícolas del territorio florentino. Como aperitivo, puedes elegir entre crostini con hígados y polenta frita con setas, o bien, una sabrosa bruschetta con aceite de oliva virgen extra local. Son típicas las sopas, preparadas con ingredientes de la temporada, como la ribollita. La protagonista de los platos otoñales es la castaña, que se utiliza para hacer rellenos de tortelli, pero también postres y budines.