La Última cena de Lippo Memmi en la Catedral de San Gimignano - Credit:
Lippo Memmi
La Catedral de San Gimignano presume de un típico estilo románico toscano. Originalmente fue una simple parroquia, el edificio antes sufrió diversas renovaciones y ampliaciones hasta que se transformó en la espléndida iglesia que podemos admirar hoy en día.
El interior está decorado con hermosos frescos: a lo largo de la pared izquierda se encuentran las Historias del Antiguo Testamento de Bartolo di Fredi, mientras que la pared derecha representa las Historias del Nuevo Testamento atribuidas a Barnaba da Siena. En la entrada de la nave central, hay dos famosas estatuas de madera de Jacopo della Quercia a cada lado del fresco de Benozzo Gozzoli que representa el Martirio de San Sebastián.
También se le atribuyen frescos dentro de la catedral a Taddeo di Bartolo, incluyendo el Juicio Final en las arcadas derecha e izquierda de la parte superior de la nave central. En el transepto derecho se encuentra la Capilla Santa Fina, terminada en el 1468 y uno de los tesoros más preciados de la catedral gracias a los frescos de Domenico Ghirlandaio que representan a San Gregorio anunciando la muerte inminente de Santa Fina. La capilla también conserva el osario del Santo y un elegante altar.
