Visitar Florencia: para algunos, el sueño de toda una vida; para otros, un destino al que volver varias veces en la vida.
Destino predilecto para los amantes del arte, los viajes escolares y los viajes en grupo, pero también para familias y parejas, Florencia es también una ciudad viva donde se vive y se trabaja inmerso en un ambiente rico en arte, belleza e historia.
He aquí algunas ideas para una estancia sostenible.
¿Museos cerrados los lunes? ¿Cola imprevista para entrar, estropeando el programa que habíamos hecho, de forma totalmente utópica?
El conocimiento es la primera clave del éxito incluso cuando se visita Florencia, por lo que conviene informarse con antelación. En el sitio web oficial de turismo de Florencia y de la zona florentina www.feelflorence.it o en los mostradores de los infopoints encontrará información sobre los horarios de apertura de los museos y los eventos actuales.
Planificar el acceso a lugares de interés como los Uffizi o la Accademia, conocer los costes y las posibles reducciones sirve para no perder tiempo y tener más oportunidades.
Además, no sólo están los famosos y concurridos museos: la oferta cultural de Florencia es interminable, y la valiosa herramienta para conocerla es la Firenze Card, que da acceso a casi todos los monumentos de la ciudad y sus alrededores.
El centro histórico de Florencia es pequeño y pensar en utilizar el coche propio tiene poco sentido.
El centro está cerrado al tráfico privado por una ZTL, e incluso si se consigue un permiso para entrar, no hay muchas posibilidades de aparcamiento. Y luego, con toda sinceridad, los coches en las calles tan estrechas del centro de Florencia son una incomodidad.
¿Alternativas? Encontrar alojamiento fuera del centro de la ciudad y utilizar el transporte público, o llegar a la ciudad sin coche y desplazarse a pie o en bicicleta, por ejemplo, utilizando el servicio de bicicletas bike sharing.
Además de ayudar al medio ambiente, esto permite adentrarse en la vida de Florencia de una forma más responsable.
Ya sea un recuerdo de Florencia, un helado o una prenda de moda, el consejo a la hora de comprar es usar la cabeza.
Esta ciudad tiene gloriosas tradiciones de buena comida y buen vino. También cuenta con una respetable tradición artesanal y manufacturera.
Vivir Florencia significa también salir de los tópicos, de las marcas internacionales presentes en todas partes, privilegiando el aspecto local.
Así que busquen tiendas y artículos originales, preparaciones únicas y creaciones novedosas: también será una forma de entrar en contacto y relacionarse con los lugareños, sobre todo si les apasiona su trabajo.
Y los últimos consejos: eviten el comercio abusivo de productos falsificados de vendedores ambulantes improvisados; elijan comida local -incluso callejera- de temporada, tradicional.
Este es el punto más delicado: respetar y exigir respeto. Hay sencillas precauciones que sustentan la convivencia de ciudadanos y turistas: no tirar basura sin motivo, no pintarrajear monumentos ni cargarlos con objetos inútiles como candados. Respetar las normas de circulación, la recogida de basuras y el verde público, no gritar ni escuchar música en plena noche.
Si el alojamiento está en un edificio privado, conviene ser consciente de que, mientras estamos de vacaciones, la gente se levantará por la mañana para ir a trabajar o al colegio.
Pero incluso cuando paseamos por el centro de la ciudad o visitamos un museo, saber dónde estamos y actuar en consecuencia en la forma en que nos comportamos y vestimos será de agradecer.
Intenta salir del espacio tan fascinante pero reducido del centro histórico. A pocos minutos del corazón de Florencia se encuentran pueblos ricos en arte e historia como Fiesole, Calenzano, Impruneta (y muchos otros).
Alrededor de la ciudad se encuentran paisajes de ensueño, increíblemente variados: desde las llanuras del oeste hasta las hermosas colinas que rodean la ciudad, pasando por las montañas de la zona preapenínica del este.
Podrás perderte entre campos de olivos, viñedos hasta donde alcanzar la vista y avenidas bordeadas de cipreses.
Encontrarás lomas azotadas por el viento, pueblos fortificados, lagos, bosques integrales, solitarias iglesias parroquiales. Un precioso patrimonio a la espera de ser visitado: este es el territorio de Florencia y el Área Florentina.
Las sugerencias que ha encontrado en este artículo son los puntos de la campaña #EnjoyRespectFirenze, promovida por el Ayuntamiento de Florencia y actualmente en curso: una acción de comunicación dirigida a todos los visitantes de la ciudad de Florencia.
La campaña está llenando los espacios públicos: se puede ver en autobuses y tranvías, en el aeropuerto, en los tablones de anuncios del centro de la ciudad; circula por las redes sociales y en la prensa.
También hay un sitio web específico.