Caminando por los alrededores de Prato

Entre castillos y torres medievales, la Vía de los Fuertes pasa entre Montemurlo y el valle del Bisenzio, en un paisaje impregnado de historia medieval y exuberante naturaleza. 
El camino consta de dos etapas que suman unos 45 kilómetros y también es apto para las familias.
Partimos de Montemurlo y su pueblo fortificado, el núcleo más antiguo de la zona, frecuentado por etruscos y romanos. 
El itinerario continúa en dirección a los pueblos de Popigliano y Grisciavola hasta el vado de Vaiano y el imponente complejo de Abadía de San Salvatore.
Atravesando luego los pueblos de Montauto, Mezzana y Montecuccoli, llegamos hasta el Fuerte Cerbaia. Según una antigua leyenda, Dante Alighieri, huyendo de Florencia, llegó aquí una noche de 1285 en busca de refugio, pero fue rechazado.

Es un itinerario seguramente más exigente, pero sin duda sugestivo y lleno de sorpresas: la Vía de la Lana y de la Seda, con sus 130 kilómetros entre Toscana y Emilia-Romaña, une las ciudades de Prato y Bolonia.
Un itinerario de senderismo de carácter especialmente salvaje donde naturaleza, historia y tradición van de la mano.
Además de la belleza del paisaje, de un lado a otro, también se puede descubrir el mundo de la arqueología industrial y de las aguas, símbolos de la historia y la laboriosidad, como el Cavalciotto de Santa Lucía, una auténtica joya milenaria que inició la tradición textil de Prato.
Además, en los territorios de Vernio y Vaiano se puede visitar la Abadía de Santa Maria a Montepiano y la Abadía de San Salvatore y su museo.

Y para seguir los pasos de la familia más poderosa de todos los tiempos, la Vía de los Medici ofrece cuatro etapas de dificultad media por un total de 78 kilómetros.
El camino se abre con un conjunto de maravillas históricas y paisajísticas: desde el Parque de Cascine di Tavola, una zona verde urbana de unas 300 hectáreas a las afueras de la ciudad de Prato y construida en el Siglo XV por Lorenzo El Magnífico, se llega a Poggio a Caiano y su espléndida Villa Medici, construida también a instancias de él.
Inmersa en las hermosas colinas de Carmignano, se llega a la magnífica Villa La Ferdinanda, también conocida como "Villa de las Cien Chimeneas", diseñada por Buontalenti por encargo del Gran Duque Ferdinando I de Medici. 
El itinerario continúa por la naturaleza de Montalbano: pequeñas iglesias rurales pero también lugares llenos de historia como el área arqueológica y naturalística de Pietramarina.
Muy cerca se encuentran las colinas queridas por Leonardo da Vinci y su lugar de nacimiento. Por último, la hermosa Villa de los Medici de Cerreto Guidi -una joya arquitectónica declarada Patrimonio de la Humanidad por UNESCO- cierra este hermoso itinerario.