Lunigiana, puerta de entrada ala Toscana por la Vía Francígena, es una tierra histórica donde imponentes castillos y fortalezas medievales dominan el paisaje y observan desde lo alto los pasos de los visitantes. Un testimonio muy importante vinculado principalmente al dominio secular de la familia Malaspina (Siglos XI-XVIII), así como a la posición estratégica del territorio, situado a lo largo de las principales vías de comunicación entre el norte y el centro de Italia.
Pero, ¿por qué hay tantos castillos en Lunigiana?
El linaje de los Malaspina no observaba la regla tradicional del mayorazgo, según la cual toda la herencia pertenecía únicamente al hijo mayor, sino que el feudo y el poder se repartían entre todos los hijos. Una peculiaridad que, a lo largo de los siglos, ha provocado la continua fragmentación del territorio en numerosos pequeños feudos enfrentados entre sí y cada uno con su propia vivienda, pero que ha dado a Lunigiana un patrimonio inestimable.
Los amantes de la historia y quienes se fascinan con las leyendas antiguas no deberían perderse una visita a los castillos de Lunigiana. En este artículo recomendamos algunos de ellos.
La imponente fortaleza militar que domina desde lo alto la histórica ciudad de Pontremoli
Su historia se remonta a la Edad Media, cuando pasó a ser propiedad de la familia Malaspina y, más tarde, fue objeto de numerosos conflictos entre familias nobles interesadas en su posición estratégica, que la convirtieron en residencia nobiliaria.
Hoy, tras importantes obras de restauración, el Castillo Piagnaro alberga el Museo de Estatuas Estelas de Lunigiana y ofrece a sus visitantes una impresionante vista panorámica de la ciudad y del valle circundante.
Para más información sobre los días y horarios de apertura, visita sitio web statuestele.org
La fortificación militar que controla la Vía Francígena y el río Magra
Originalmente perteneciente a la familia Malaspina del Spino Secco, en 1450 cayó en manos de la familia genovesa Campofregoso, que la demolió parcialmente antes de entregarla a los Grandes Duques de Toscana, quienes ampliaron la residencia a principios del Siglo XVII.
Hoy, en las salas del Castillo de Lusuolo se encuentra el Museo de la Emigración del Pueblo Toscano con el objetivo de poner de relieve el fenómeno de la emigración toscana en el mundo.
Para más información sobre los días y horarios de apertura, visita el sitio web sigeric.it
Una terraza panorámica desde los Apeninos hasta los Alpes Apuanos
Durante siglos los protagonistas de los asuntos de la familia Malaspina del Spino Secco en el Valle de Taverone, en el Siglo XVI el castillo fue transformado por el Marqués Moroello Malaspina en una noble mansión, con maravillosos techos abovedados y chimeneas monumentales.
En la actualidad, la familia Malaspina ha restaurado la mansión para devolverle su antiguo esplendor. De hecho, el castillo es el único de Lunigiana, aparte de Fosdinovo, que ha permanecido en propiedad de los descendientes de sus primeros señores feudales.
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Uno de los ejemplos más significativos de fortificación en Lunigiana
Encaramado en una colina que domina el Valle del Taverone y perteneciente a la familia Malaspina, ha acogido a lo largo de los siglos a varias personalidades ilustres: Angelica Malaspina, famosa novia de Giulio De' Medici, Annetta Malaspina, alabada por los poetas de Arcadia, y Giovanni dalle Bande Nere, ¡capitán florentino de fortuna!
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Fortificación militar renacentista rodeada de misterio
Situada en una posición dominante sobre un espolón rocoso alto y oscuro, la Fortaleza Brunella de Aulla controlaba todas las carreteras principales y los pasos de los Apeninos. Entre sus mecenas figuraban nombres tan ilustres de la época como Adamo Centurione y Giovanni dalle Bande Nere.
A principios del Siglo XX, la fortaleza fue renovada por la familia inglesa Waterfield, que la utilizó como lujosa residencia, mientras que en la actualidad alberga el Museo de Historia Natural de Lunigiana.
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Para una experiencia intemporal
Este imponente castillo domina toda la llanura del río Magra, la antigua Luni y los pasos de los Apeninos. En la Edad Media, fue una importante zona de paso para mercaderes y peregrinos de la Vía Francígena que encontraban refugio y refrigerio en sus habitaciones.
En la actualidad, el Castillo de Fosdinovo es uno de los raros ejemplos de Lunigiana en cuanto a estado de conservación y sigue siendo protagonista de antiguas historias y leyendas.
Para más información sobre los días de apertura y los horarios de apertura, visita el sitio web castellodifosdinovo.it
Para profundizar las informaciones sobre los castillos de Lunigiana, visita el sitio web del Instituto para la Valorización de los Castillos istitutovalorizzazioneecastelli.it