Toscana es un cofre de tesoros artísticos, custodiados en algunos de los museos más famosos y visitados del mundo, pero hay todo un mundo más allá de los Uffizi o la Galería de la Academia.
Hemos elegido para tí 5 museos insólitos, para un itinerario fuera de aquellos habituales.
Stibbert es uno de los museos más inesperados de Florencia y merece absolutamente la pena visitarlo. La casa-museo alberga la extraordinaria colección de armas y objetos de arte de Oriente reunida en el Siglo XIX por Frederick Stibbert. En la Sala Cavalcata, te dejarán boquiabierto los caballeros europeos y otomanos de tamaño natural, por no hablar de las katanas y armaduras procedentes de Japón, que pertenecieron realmente a los últimos samuráis. El jardín tampoco es menos excéntrico, con ruinas falsas y un antiguo estilo egipcio.
Muy cerca de Florencia, en Signa, el Museo de la Paja y el Tejido está dedicado a una de las tradiciones artesanales más antiguas de Toscana. Aquí podrás descubrir cómo se cultiva la paja y se modelan los sombreros, así como admirar los modelos más bellos del pasado y del presente, como el famoso sombrero de paja, fabricado desde principios del Siglo XVIII, que se ha convertido en uno de los símbolos de Florencia más famosos del mundo.
Situado en San Giovanni d'Asso, una aldea de Montalcino, se encuentra el primer Museo italiano dedicado a la trufa: un recorrido expositivo que ocupa 250 metros cuadrados en los sótanos de un antiguo castillo. La primera sección está dedicada al "misterio de la trufa" y a las múltiples interpretaciones que ha tenido a lo largo del tiempo. La segunda parte del museo ofrece diversas experiencias sensoriales a través de recorridos que implican el tacto, el oído, el gusto y, por último, el llamado "odorama", dedicado al sentido del olfato.
Pero hay otro oficio aún más antiguo que aquel de la paja, y es el del alabastro, ya utilizado por los Etruscos para fabricar urnas cinerarias y ornamentos. En Volterra, cuna de los yacimientos de alabastro, hay un museo dedicado a este precioso material, transparente y muy duro a la vez. El museo, ubicado en un antiguo convento Agustiniano del Siglo XII, contiene más de 300 obras de alabastro desde el Siglo XVIII hasta nuestros días.
El paraíso para todos los aficionados al "fútbol", en cambio, está en Florencia: el Museo del Fútbol, único en Italia, recoge toda la historia de este deporte en nuestro país. Aquí podrás admirar recuerdos, como medallas y copas, películas y fotografías desde 1934 hasta nuestros días, y conocer todos los hitos de la historia de los Azzurri, con especial atención a las victorias de la selección italiana en la Copa del Mundo y los Campeonatos de Europa.