Quienes viajan en bicicleta conocen bien esa sensación de libertad y contacto directo con la naturaleza que sólo las dos ruedas pueden dar. La bicicleta es la mejor manera de conocer el alma de un territorio: llega a los lugares más bellos, muestra unas vistas increíbles y permite atravesar paisajes encantados.
La Toscana ofrece a los amantes de las dos ruedas numerosas rutas ciclistas que recorren todo el territorio: desde las más exigentes, hasta las más adecuadas también para familias con niños, desde los senderos de las montañas toscanas, hasta las que atraviesan las ciudades de arte. Aquí te esperan escenarios impresionantes: desde las playas más bonitas hasta los picos de las montañas, pasando por las grandes ciudades de arte y perdiéndose en la fabulosa campiña. Rutas marcadas y servicios de calidad te ayudarán a hacer inolvidables tus vacaciones, con seguridad y calidad.