De Pianella a Castelnuovo Berardenga, por el Chianti sienés
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Pianella, una pequeña aldea en las colinas de del Chianti sienés, es el punto de partida y de llegada de este itinerario circular de 58 km, bastante exigente.
Se recomienda abordarlo con una bicicleta gravel, una de paseo con rueda ancha o una BTT de buena calidad, vistas las carreteras de tierra y las pronunciadas pendientes.
El viaje comienza por una carretera asfaltada que asciende suavemente hasta Villa Pagliaia, para llegar, tras una empinada subida, a Villa a Sesta, un pueblo sin contaminación famoso por sus restaurantes con estrellas. Un poco más adelante, el pueblo fortificado de San Gusmé recibe a los visitantes con su ambiente intemporal.
A partir de aquí, el reto se hace más intenso. La subida a la planicie de Campi, a 644 metros de altitud, es una prueba para las piernas y el aliento. Esta zona, elegida por los etruscos por sus impresionantes vistas de 360 grados, está cargada de historia: aquí, en la Edad Media, los sieneses construyeron las fortalezas de Sesta y Cetamura para defenderse de los florentinos. Cada pedalada hacia la cima se ve recompensada con vistas panorámicas. No puedes perderte el mojón que indica el nacimiento del Ombrone.
El camino de grava conduce al pueblo de Rosennano y luego continúa hasta Montebenichi, un pueblo muy antiguo que marca el límite entre los territorios de Chianti y Valdarno. Aquí, tras cruzar el Ambra y bordear el río Ombrone, llegamos a la Abbadia a Monastero, un edificio religioso que a lo largo del tiempo albergó primero un convento de monjas y después a los monjes de la Abbadia di San Salvatore.
Volviendo a la carretera asfaltada, continuamos hacia Castelnuovo Berardenga, pasando por la villa de Sestano, famosa por su magnífico jardín histórico. En Castelnuovo se puede parar a descansar antes de reanudar el camino de vuelta a Pianella.