Tres días desde San Godenzo hasta Florencia entre parroquias, iglesias y aldeas medievales
El camino de Dante es un largo itinerario por etapas, que incluye algunos de los lugares más significativos de la vida del poeta. En tres días de viaje exploraremos uno de los tramos más importantes del Camino en Toscana. A partir de Val di Sieve seguiremos antiguos caminos y senderos medievales, visitaremos iglesias, parroquias y fuertes contemporáneos del autor de la Divina Comedia, y por último llegaremos a su amada Florencia.
En San Godenzo la Abadía nos catapultará al año 1302, cuando en el edificio se reunieron los expatriados güelfos blancos y los gibelinos. Entre ellos se encuentra Dante en persona, exiliado y condenado a muerte por el alcalde de Florencia, Cante Gabrielli da Gubbio. En el pequeño pueblo los exiliados firmaron un pacto con el sello del notario, ahora conservado en el Archivo de Estado de Florencia.
Caminamos por Dicomano siguiendo los senderos recorridos por Dante en su huida hacia Romagna, entre parroquias y castaños, paisajes en gran parte inalterados con respecto a los tiempos de su pasaje. Conoceremos los lugares de su juventud, cuando iba a la residencia familiar de verano cerca de Pontassieve y luego los sitios que no dejó de mencionar en la Comedia. Por último llegaremos a Florencia, en el corazón de su ciudad.
Llegamos temprano por la mañana. Visitamos la Abadía San Godenzo, refugio en el 1302 de los güelfos blancos, entre ellos, Dante y la Ermita Santa Maria, de más de mil años de antigüedad, con vistas al Valle Montone. Nos dirigimos hacia Castagno D'Andrea, que debe su nombre al pintor del siglo XV, Andrea Del Castagno. En el pequeño pueblo es posible visitar el Museo Virtual dedicado a él, que se encuentra en el interior del Centro Visitantes Montaña Falterona, una de las entradas al Parque de los Bosques de Casentino. El castaño aquí ha formado la historia y la tradición campesina. Nos damos cuenta de esto caminando hasta Spaliena rodeados de árboles seculares.
Después de subir a la montaña Campaccio, descendemos hasta la Capilla Tizzano, que custodia una antigua terracota que, según la tradición, fue milagrosamente encontrada por un campesino. Desde aquí proseguimos por el camino de CAI 1A, hasta el sitio arqueológico de Frascole. El sitio se encuentra aún en fase de excavación, pero se puede visitar, y se pueden observar los sedimentos de diferentes épocas descubiertos por los arqueólogos: desde los restos de la Iglesia San Martino del siglo XIII hasta los de una imponente estructura Etrusca, pertenecientes a la dinastía Velasca. Desde el sitio nos dirigimos al centro de Dicomano donde nos alojamos.
Llegamos temprano por la mañana. Visitamos la Abadía San Godenzo, refugio en el 1302 de los güelfos blancos, entre ellos, Dante y la Ermita Santa Maria, de más de mil años de antigüedad, con vistas al Valle Montone. Nos dirigimos hacia Castagno D'Andrea, que debe su nombre al pintor del siglo XV, Andrea Del Castagno. En el pequeño pueblo es posible visitar el Museo Virtual dedicado a él, que se encuentra en el interior del Centro Visitantes Montaña Falterona, una de las entradas al Parque de los Bosques de Casentino. El castaño aquí ha formado la historia y la tradición campesina. Nos damos cuenta de esto caminando hasta Spaliena rodeados de árboles seculares.
Después de subir a la montaña Campaccio, descendemos hasta la Capilla Tizzano, que custodia una antigua terracota que, según la tradición, fue milagrosamente encontrada por un campesino. Desde aquí proseguimos por el camino de CAI 1A, hasta el sitio arqueológico de Frascole. El sitio se encuentra aún en fase de excavación, pero se puede visitar, y se pueden observar los sedimentos de diferentes épocas descubiertos por los arqueólogos: desde los restos de la Iglesia San Martino del siglo XIII hasta los de una imponente estructura Etrusca, pertenecientes a la dinastía Velasca. Desde el sitio nos dirigimos al centro de Dicomano donde nos alojamos.
Por la mañana daremos un paseo por el centro de Dicomano. Visitamos la Parroquia Santa Maria, cuya existencia estaba documentada ya en el siglo XII. En su interior hay pinturas de los siglos XIV y XVI. En las afueras del pueblo visitamos el Oratorio Sant'Onofrio, construido a finales del siglo XVIII y considerado uno de los más grandes ejemplos del neoclasicismo. Admiramos los elegantes edificios que se suceden con logias y arcos sobre pilares cuadrados, en particular los palacios Dalle Pozze y Della Nave en Plaza Buonamici.
Salimos del pueblo siguiendo las señalaciones del Camino de Dante entre campos de olivos y tramos de calles medievales, a lo largo del río Sieve hasta Montebonello que nos recibe con su torre medieval, antiguamente un presidio fundamental que custodiaba el acceso a Val di Sieve desde Val d'Arno. Reanudamos nuestro viaje para llegar a Pontassieve.
Por la mañana daremos un paseo por el centro de Dicomano. Visitamos la Parroquia Santa Maria, cuya existencia estaba documentada ya en el siglo XII. En su interior hay pinturas de los siglos XIV y XVI. En las afueras del pueblo visitamos el Oratorio Sant'Onofrio, construido a finales del siglo XVIII y considerado uno de los más grandes ejemplos del neoclasicismo. Admiramos los elegantes edificios que se suceden con logias y arcos sobre pilares cuadrados, en particular los palacios Dalle Pozze y Della Nave en Plaza Buonamici.
Salimos del pueblo siguiendo las señalaciones del Camino de Dante entre campos de olivos y tramos de calles medievales, a lo largo del río Sieve hasta Montebonello que nos recibe con su torre medieval, antiguamente un presidio fundamental que custodiaba el acceso a Val di Sieve desde Val d'Arno. Reanudamos nuestro viaje para llegar a Pontassieve.
En la pequeña aldea Pagnolle se puede visitar una residencia que se cree que perteneció a la familia Alighieri y donde el joven Dante pasó probablemente algunos veranos. La curiosidad es que a poca distancia de allí se encontraba también la villa de la familia de Beatrice, los Portinari, por lo que algunos llegaron a decir que el encuentro entre ambos podría haber tenido lugar en la antigua Parroquia San Miniato, el centro de la vida religiosa del pequeño pueblo. Se puede visitar la Parroquia Sant'Eustachio y la Iglesia Santa Maria de Acone, el pequeño pueblo mencionado por Dante en el Canto del Paraíso del siglo XVI como lugar de origen de la familia de los Cerchi, cerca de él.
De vuelta en Pontassieve visitamos el centro histórico. El pueblo está encaramado en torno al Castillo Sant'Angelo, construido en el siglo XIV por algunas familias nobles florentinas, lo que indica el vínculo indisoluble con la ciudad del lirio. El nombre tiene su origen en el puente construido en el Sieve a mediados del siglo XVI por Cosimo I de los Medici y que sigue siendo aún hoy su símbolo, con sus arcos de ladrillos rojos y el escudo de la familia florentina.
Dejando atrás Pontassieve, continuamos por el río que desemboca en el Arno para llegar a la Abadía Rosano, fundada en el año 780. El camino continúa a través de los olivares hasta San Prugnano con vistas al valle de Florencia. Continuamos hasta llegar al Lungarno y de aquí al Museo Casa de Dante en Florencia, en vía Santa Margherita.
En la pequeña aldea Pagnolle se puede visitar una residencia que se cree que perteneció a la familia Alighieri y donde el joven Dante pasó probablemente algunos veranos. La curiosidad es que a poca distancia de allí se encontraba también la villa de la familia de Beatrice, los Portinari, por lo que algunos llegaron a decir que el encuentro entre ambos podría haber tenido lugar en la antigua Parroquia San Miniato, el centro de la vida religiosa del pequeño pueblo. Se puede visitar la Parroquia Sant'Eustachio y la Iglesia Santa Maria de Acone, el pequeño pueblo mencionado por Dante en el Canto del Paraíso del siglo XVI como lugar de origen de la familia de los Cerchi, cerca de él.
De vuelta en Pontassieve visitamos el centro histórico. El pueblo está encaramado en torno al Castillo Sant'Angelo, construido en el siglo XIV por algunas familias nobles florentinas, lo que indica el vínculo indisoluble con la ciudad del lirio. El nombre tiene su origen en el puente construido en el Sieve a mediados del siglo XVI por Cosimo I de los Medici y que sigue siendo aún hoy su símbolo, con sus arcos de ladrillos rojos y el escudo de la familia florentina.
Dejando atrás Pontassieve, continuamos por el río que desemboca en el Arno para llegar a la Abadía Rosano, fundada en el año 780. El camino continúa a través de los olivares hasta San Prugnano con vistas al valle de Florencia. Continuamos hasta llegar al Lungarno y de aquí al Museo Casa de Dante en Florencia, en vía Santa Margherita.