Un itinerario a través de la comida, el vino y la naturaleza
El paisaje más característico y hermoso de Toscana da la bienvenida al visitante que se acerca a Cortona: una campaña espléndida, rodeada de viñedos y olivares, donde se abre paso el Camino de los Vinos de Cortona, un itinerario turístico a través de la comida y el vino que cuenta con una antigua tradición vinícola.
Los primeros vestigios documentados de la producción del vino en Cortona se refieren al siglo III a.C.; en el Museo de Cortona se conserva la Tabula Cortonensis, una especie de contrato que da fe de la transacción de un viñedo. Desde entonces, a lo largo de los siglos, Cortona se ha enriquecido no sólo por su excelente producción de vino, con el reconocimiento de DOC Cortona, sino también por artistas como Pietro Berrettini, Luca Signorelli, Gino Severini, por obras arquitectónicas como la Iglesia Santa Maria delle Grazie al Calcinaio diseñada por Giorgio Martini, o la Iglesia San Francesco diseñada por Fra Elia da Cortona y la primera Iglesia franciscana construida en las afueras de Asís.
Itinerario recomendado
Para conocer las características del Camino del Vino de Cortona, te recomendamos seguir este itinerario. Partiendo del Museo de la Civilización Campesina de Fratticiola que recorre, con la visión de antiguos carros y herramientas, la historia de la tradición campesina del territorio, en la campaña cercana se puede visitar un criadero de cerdos en libertad y el laboratorio de elaboración de los embutidos.
Yendo en dirección a Cignano, a lo largo del camino se puede conocer y visitar una empresa de cría de ovejas y productora de quesos de oveja, luego llegando a Barullo se pueden ver los cultivos del azafrán amarillo y, continuando con la degustación de los vinos del distrito del instituto de agricultura.
Puedes también visitar una empresa que produce aceite de oliva virgen extra y finalmente, llegando a Cortona, deberás elegir en cuál posada, enoteca, restaurante, taberna ir a degustar los platos tradicionales del territorio.
Productos típicos
La producción de vinos en el territorio es del más alto nivel, sin olvidar productos gastronómicos únicos, como el bistec de Chianina, los embutidos de Cinta Senese y los quesos típicos de oveja como el pecorino.
Para recibir a los huéspedes que desean visitar estos maravillosos itinerarios, existe una amplia gama de alojamientos que van desde los típicos agroturismos recuperados de casas coloniales de piedra hasta las lujosas mansiones, pasando por los Bed & Breakfast a los elegantes hoteles.