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Itinerarios
Las rutas terrestres y marítimas de los Etruscos

Desde el corazón de Etruria hasta el mar, descubriendo los territorios implicados en los intercambios comerciales de los etruscos

Sobre las huellas y las rutas del comercio etrusco, desde las ciudades del interior hasta las poblaciones costeras. Un itinerario que va desde la vertiente occidental de la Montaña Amiata hasta el mar y la porción de costa disputada entre las ciudades etruscas de Vetulonia y Roselle, en cuyo territorio se encontraban el Argentario y parte de Toscana del Sud. Partiendo del centro de Etruria, nos desplazamos por las colinas hasta los puertos donde los Etruscos llegaban aprovechando el curso del río Ombrone y sus afluentes; en aquella época, por estos ríos pasaban muchísimas embarcaciones ricas en mercancías.

Entre los productos más exportados por los Etruscos se encontraban el vino, elaceite, los cereales, los metales y las artesanías de cerámica y el bronce. Cuando llegaban al mar, las ciudades estaban llenas de vida: los mercaderes llenaban sus barcos de carga y luego partían hacia destinos cercanos como Sicilia y Cerdeña, pero también hacia lugares más lejanos e inaccesibles como Chipre, Grecia, las costas españolas y aquellas francesas y Siria.

En un viaje entre la tierra y el mar, siguiendo las rutas comerciales de los Etruscos, se puede apreciar el paisaje montañoso del interior de Etruria central y el paisaje lagunar y costero, diseminado hoy de oasis naturalísticos, puertos sugestivos, castillos y pueblos encaramados, museos y parques arqueológicos de gran belleza.

Civitella Paganico
Civitella Paganico - Credit: Toscana Terra Etrusca

L'itinerario può partire tra montagna e collina, alle pendici dell'antico vulcano ormai spento che domina il sud della Toscana, l'Amiata. In un contesto ambientale di rara bellezza svettano tre borghi carichi di fascino che affondano le proprie radici in epoca etrusca, Cinigiano, Civitella Paganico e Roccastrada. Ai piedi del Monte Amiata, la “Montagna sacra” degli etruschi, e arroccati su tre poggi, si affacciano sulle vallate circostanti, custodendo una ricca eredità; numerosi sono gli scavi archeologici effettuati nei territori circostanti, in particolare quelli di Casenovole nei pressi di Civitella Paganico nella valle dell'Ombrone, che portarono alla luce una necropoli ellenistica. Dodici i sepolcri emersi, fra cui la cosiddetta Tomba del Tasso, quella dello Scarabeo e quella delle Foglie d'Oro; inoltre furono rinvenuti corredi funerari, come vasellame di vario genere, monete ed oggetti di oreficeria. Resti che testimoniano l'importanza dell'area che costituiva terra di confine.

Scansano
Scansano - Credit: Benedetta Perissi

Acercándose a la costa, se intercepta el interior que abraza la zona urbana de Grosseto, con el encanto de la campiña típica de Maremma y guardiana de una grande riqueza histórica. A un máximo de media hora en coche de la capital del sur de Toscana, hay numerosos lugares donde se desarrolló la civilización etrusca en la antigüedad. La cercana Roselle, ciudad fundada antes del Siglo VII a.C. por los etruscos y posteriormente convertida en romana, es hoy uno de los principales sitios arqueológicos toscanos, al igual que el área arqueológica de Vetulonia, una aldea de Castiglione della Pescaia, algunos de cuyos vestigios se conservan en el Museo Arqueológico Isidoro Falchi, en el centro del pueblo. Y luego están las tierras donde la historia etrusca está vinculada al vino, Gavorrano y Scansano; en los alrededores de estos espléndidos pueblos se encuentran importantes sitios etruscos como la necrópolis de San Germano en Rocca di Frassinello y la antigua ciudad de Ghiaccio Forte.

La pequeña plaza de Capalbio
La pequeña plaza de Capalbio - Credit: Benedetta Perissi

Siguiendo la costa hacia el sur, Maremma se revela entre relieves costeros como el Monte Argentario, antaño una isla del Archipiélago Toscano, y Capalbio, un encantador pueblo encaramado a una colina no lejos del mar. Es la última franja de Toscana en la frontera con Lazio: toda la zona está esparcida de vestigios, la antigua Capalbio, así como Porto Ercole en el promontorio del Monte Argentario, tienen sus orígenes en la civilización etrusca; hay numerosos asentamientos y túmulos apreciables en toda Maremma del sur.

Un vista de Campiglia Marittima
Un vista de Campiglia Marittima - Credit: Benedetta Perissi

Acantilados sobre el mar, tómbolos y pueblos con vistas al mar Tirreno. Al llegar a la Costa Etrusca, uno se encuentra con una tierra donde las aguas cristalinas se combinan con la historia y los paisajes costeros más fascinantes impregnados de mitos y leyendas. Como su nombre indica, este tramo de costa tiene una enorme herencia etrusca. En primer lugar, Populonia, en el territorio de Piombino, es la única ciudad etrusca que se asoma al mar. En el interior de su castillo se encuentra el museo arqueológico que alberga la colección privada Gasparri, una recolección de objetos procedentes de las excavaciones arqueológicas realizadas en la zona y en Baratti en la primera mitad del Siglo pasado, zona que también abarca el parque arqueológico homónimo. Y luego Cecina y Campiglia marittima, que albergan un parque arqueológico y un museo. El primero conserva reliquias y restos de gran interés; el segundo es el custodio de antiguos hornos de fundición escondidos por la vegetación. Estos testimonios confirman la antigua vocación de la zona por la extracción y transformación de los metales, como el cobre y el plomo argentífero, la misma predilección de la Rocca di San Silvestro, en el homónimo parque arqueo-minero.

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