Asciano

El pueblo todavía muestra el típico trazado medieval, por donde es agradable caminar, sin prisas, para descubrir lugares escondidos que se abren a plazas inesperadas o edificios históricos antiguos.  Entre los numerosos sitios de interés merece la pena visitar la Basílica Santa Ágata , así como - permaneciendo en tema religioso - las Iglesias San Agustín y San Francisco. Este último custodia un gran retablo proveniente del taller de la Robbia, que representa una "Virgen y el Niño con Ángeles" y una pila bautismal de mármol realizada por Antonio Ghini.  

Continuando por las calles del centro histórico se llega a la pintoresca Plaza del Grano con su fuente del siglo XV, que muestra las alegorías de una fascinante cultura medieval, y al Palacio del Podestá, con sus antiguos escudos.

Además, te aconsejamos visitar el Museo del Palacio Corboli que conserva, en el interior de un edificio medieval muy valioso, una colección importante de obras organizadas en dos secciones: Arte Sagrado y Arqueología. Daily Telegraph lo ha elegido entre los 15 pequeños museos más bellos de Italia.

También es de considerable interés el Museo Cassioli: el único dedicado enteramente a la pintura de Siena del Siglo XIX. Construido en el 1991 gracias al importante legado de obras de la familia Cassioli, originaria de Asciano, e implementado en el 2007 exponiendo numerosas obras propiedad del Liceo Artístico "Duccio di Buoninsegna" de Siena, el Museo se encuentra en un valioso edificio de principios del siglo XX.

En las típicas campañas de Asciano, en el corazón de Crete Senesi, a pocos kilómetros del pueblo, se encuentra la espléndida Abadía de Monte Oliveto Maggiore, un espléndido complejo monástico con numerosos tesoros de arte. La abadía ha sido fundada a principios del '300 por Beato Bernardo Tolomei, un noble de Siena que abandonó el lujo y las riquezas para dedicarse a una vida de pobreza y soledad. La abadía fue también un importante centro religioso, pero también cultural y económico, siendo particularmente famosa y vital durante el período del Renacimiento.

Asciano también está atravesado por la famosa Vía Lauretana, un antiguo camino etrusco-romano que une Cortona con Montepulciano y Siena.

Una de las manifestaciones folclóricas más características de Asciano es el Palio de Ciuchi, en el que cada domingo de septiembre se enfrentan los siete barrios en las calles del pueblo.  

Además, en febrero se celebra el histórico Carnaval de Asciano, entre papel picado y tiras de colores, música, espectáculos y bromas, no falta la alegría en las calles del pueblo.

En octubre, no hay que perderse el paso de las bicicletas de época en el centro histórico de Asciano gracias a la Eroica, un evento ciclista no competitivo que se repite todos los años desde el 1997 y que tiene la particularidad de evocar el ciclismo de antaño, con recorridos que se desarrollan en gran parte en caminos blancos con bicicletas y ropa de época.

Un producto de excelencia de Crete Senesi es la Trufa blanca que se celebra cada año aquí en Asciano con la Exposición del Mercado de la Trufa Blanca de Asciano, con visitas a la zona de cultivo de la trufa y degustación de menús a base de trufas. El período de otoño es el mejor para encontrar en estas mesas, la prestigiosa trufa blanca.