El Matorral de Magona es un área natural protegida que se extiende por más de 1600 hectáreas. Permanece abierto todo el año, representa una meta ideal para el turismo naturalístico y deportivo. El bosque del Matorral de Magona, alberga varias especies de vegetación mediterránea y un oasis biogenético. Allí encontramos dieciséis itinerarios a lo largo de 50 kilómetros, perfectos para explorar un entorno con una exuberante vegetación. Recomendamos también el recorrido en el corazón de Magona, un itinerario especial para recorrer a pie, en bicicleta y a caballo. En el bosque, a lo largo de la llanura y en las colinas, hay bosques de latifolio y pinos, retamas, encinas, madroños, arces, olmos y muchas especies arbustivas que caracterizan el matorral mediterráneo. El Matorral de Magona es un excelente hábitat para muchas especies animales: aquí viven jabalíes, corzos, gamos, muflones, liebres, zorros, puercoespines, tejones, ardillas, martas y muchas aves migratorias como perdices, palomas torcaces y buitres.
Bibbona es también una meta ideal para el cicloturismo, tanto por carretera como en bicicleta de montaña. Aquí nació y vive el campeón Paolo Bettini y, cada año, tiene lugar el Gran Fondo de la Costa Etrusca. Se puede pedalear a lo largo del mar a través del hermoso pinar, recorrer el pintoresco Camino del Vino, subir por suaves laderas de las colinas y, en el corazón del Matorral de Magona, seguir hermosos senderos por el bosque. Hay hoteles especializados para la recepción de cicloturismo y una densa red de servicios de asistencia.