Situado en el punto donde Dante dice "el Arno desvía su curso para no pasar cerca de la gente de Arezzo", el territorio de Capolona está formado por un estrecho grupo de colinas que constituyen el límite sur de Pratomagno. Situados en suave pendientes de pequeñas aldeas y pueblos, estas colinas terminan cerca de la orilla derecha del río, donde el visitante descubrirá los antiguos pueblos de Lorenzano, Caliano, Vado y Castelluccio, en cuyas inmediaciones merece la pena visitar el pueblo de Santa Margherita, que conserva aún estructuras medievales intactas. Capolona es una meta popular, lleno de rincones ocultos e intactos, perfecto para disfrutar de un poco de paz y tranquilidad olvidándose de la caótica vida de la ciudad.