El pueblo de Collodi está compuesto por pequeñas casas que bajan en cascada desde una colina empinada. En la base se encuentra el antiguo Fuerte, en cambio, por la otra parte está la majestuosa Villa Garzoni, que surge sobre las ruinas del antiguo Castillo medieval y que parece que sostuviera todo el pueblo.
El antiguo pueblo, cuya existencia se atestigua desde finales del siglo XII, tiene un origen similar al de muchas otros pequeños pueblos: aquí, como en otros lugares, por razones principalmente militares, se invitaba a la población a subir a la colina, donde habría sido más fácil defenderse de cualquier ataque.
Collodi, como todos los pueblos que se encontraban en una posición geográfica estratégica, ha tenido una historia muy complicada. Su historia está marcada por la presencia de la familia Garzoni, que pertenecía a los Gibelinos y por lo tanto siempre vió como a un enemigo a Florencia que pertenecía a los Güelfos. Así que cuando los florentinos consolidaron su poder en Valdinievole (en el 1339), la familia Garzoni se vió obligada a emigrar a Lucca, pero mantuvo sus posesiones en Collodi, San Martino y Sesto.