Conocido desde el siglo VIII como castillo, Empoli tiene orígenes antiguos y refinados. El agradable centro histórico alrededor de la Plaza Farinata de los Uberti, en la cual encontramos el Palacio Ghibellino, sede del Museo Cívico de Paleontología y el Archivo Histórico Municipal, el Palacio Pretoriano y la hermosa Colegiata Sant'Andrea.
El aspecto actual de la Colegiata, ya mencionada en un documento de 780, se remonta al año 1093. La fachada de mármoles bicolores evidencia el límite occidental de la difusión del estilo románico florentino en el territorio. Unida a la Iglesia se encuentra la sede del Museo de la Colegiata Sant'Andrea una de las exposiciones eclesiásticas más antiguas de Italia, donde se pueden admirar auténticas obras maestras del arte toscano de los siglos XIV y XVI. Del sugestivo Baptisterio, donde se pueden admirar todos los frescos (uno es de Masolino) y para el cual se esculpió la imponente pila bautismal atribuida a Bernardo Rossellino, pasamos a la sala de esculturas (donde se pueden apreciar obras de Tino di Camaino y Mino da Fiesole). En el piso superior se encuentra la Pinacoteca, donde se exponen las obras de los talleres florentinos que funcionaron entre los siglos XIV y XV, incluyendo los dos trípticos de Lorenzo Monaco, la pequeña Maestà de Filippo Lippi, y las obras de Antonio Rossellino y Botticini. El itinerario del Museo finaliza en la parte superior del claustro con algunas obras de della Robbia.
Otra iglesia que te aconsejo visitar en el centro de Empoli es Santo Stefano (del siglo XIV) y el Convento de los Agostiniani, sede de la Biblioteca Municipal Renato Fucini. El interior de la iglesia conserva importantes restos de frescos de Masolino da Panicale, una Anunciación de mármol de Bernardo Rossellino y valiosas pinturas del siglo XVII toscano. En la cercana Plaza de la Victoria se encuentra el Museo Casa de Ferruccio Busoni, un conocido pianista y compositor nacido en Empoli en el 1866, a quien se le dedicaron un museo y un Centro de Estudios.
No muy lejos del centro se encuentra la aldea Pontorme, cuna del famoso pintor Jacopo Carucci, conocido como el Pontormo (1494-1556). En el centro de la aldea se encuentra la casa natal del artista donde está expuesta la edición facsímil del Diario y copias de los dibujos preparatorios de los paneles con San Giovanni Evangelista y San Michele Arcangelo, conservados en la cercana Iglesia San Michele. La obra, realizada en el 1519, contribuye a la definición de Jacopo como uno de los exponentes de la "modernidad". La casa donde nació conserva también la Madonna del libro - una antigua copia de un cuadro de Pontormo, aún desconocido en su versión original. Esta obra fue concedida por la Superintendencia florentina.