Quarrata se extiende entre las colinas de Montalbano, un entorno que la familia Medici adoraba en modo particular y que eligió como tranquila reserva de caza. Fernando II, en particular, se interesó en el Siglo XVII, en la construcción del Barco Reale de los Medici, una zona boscosa delimitada por tres kilómetros de murallas e interpuesta con cauces de agua y villas. Actualmente este inmenso bosque de encinas es el hogar de animales salvajes y de una flora exuberante.
El territorio de Quarrata es conocido por su tradición artesanal que la ha convertido en la "ciudad del mueble". Este distrito produce varios tipos de objetos, como sofás moldeados y tapizados, de estilo clásico y renacentista, y otros objetos de mobiliario.