Pici all'aglione
Los Pici son espaguetis grandes, gruesos y hechos a mano, típicos de la tradición campesina de las pastas caseras. Están hechos sólo de harina y agua. Si quiere preparar pasta fresca, empiece por los pici, ¡son muy fáciles de hacer! Son típicos del Val d’Orcia y del Val di Chiana, en el sur de Toscana.
En Siena hay dos salsas típicas para los pici, aunque obviamente existen otras más: la salsa de tomate y ajo y el pan rallado dorado en aceite de oliva.
Cuando el ajo está fresco y tierno, sugiero la salsa de tomate y ajo. El "aglione" es una variedad de ajo típica del Val di Chiana, es enorme y tiene dientes grandes como nueces. Su sabor es suave y delicado. Si no hay "aglione" a disposición, use el ajo más suave que pueda encontrar.
Ingredientes
Para los pici
- 500 g de harina común
- 1 cucharadita de sal
- aceite de oliva virgen extra
- 250 ml / 1 taza de agua tibia
Salsa de Aglione
- 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 4 dientes de ajo fresco
- 1 chile
- 500 g de pulpa de tomate
- sal
Preparación
Empiece por preparar los pici. Vierta la harina en un recipiente grande, luego añada la sal y un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Añada el agua poco a poco, revolviendo con un tenedor hasta que se forme una masa. La cantidad de agua necesaria puede variar de vez en vez.
Cuando la masa esté demasiado dura para mezclarla con un tenedor, colóquela sobre una tabla de madera y amásela a mano para incorporar toda la harina. Amase hasta que la mezcla esté suave. Es posible que necesite más harina si la mezcla está demasiado pegajosa, o más agua si no puede amalgamar toda la harina. Deje reposar la masa sobre la tabla de madera cubierta por el cuenco durante media hora aproximadamente.
Mientras tanto, prepare la salsa de ajo y tomate. Vierta el aceite de oliva virgen extra en una sartén de fondo grueso y añada los dientes de ajo, pelados y ligeramente triturados, la pulpa de tomate y la sal. Cueza a fuego lento durante unos 10 minutos. Deje a un lado.
Ahora haga los pici. Extienda la masa sobre la tabla con un rodillo hasta obtener un grosor de medio centímetro. No use harina, la masa no se pega.
Corte la masa con una rueda de pizza en tiras de no más de un centímetro y prepárese para hacer los pici. Haga rodar los pici con las manos como si fueran espaguetis de plastilina.
Tenga a su lado un tazón de harina de sémola y sumerja el picio en el tazón a medida que avanza, luego enrósquelo sobre de su mano y póngalo a un lado en una bandeja.
Cueza los pici en agua hirviendo salada durante unos 5 minutos, escúrralos al dente y llévelos a la sartén con la salsa. Revuelva y sirva inmediatamente, espolvoreando un poco de queso encima.