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Vista panorámica desde las colinas que rodean Montaione, con viñedos y olivares.

Empolese Valdelsa y Montalbano

Descubriendo "el corazón" de Toscana

Gracias a su posición geográfica central en Toscana y con respecto a las principales ciudades de arte, como Florencia, Siena, Pisa y Lucca el Empolese Valdelsa y Montalbano puede ser considerado el corazón de Toscana. Por lo tanto, es un punto de partida ideal para excursiones turísticas pudiendo elegir entre numerosas opciones y además, un lugar perfecto para tu permanencia.

El entorno ambiental y paisajístico de este territorio es muy variado incluyendo el clásico estereotipo del paisaje toscano, que presenta una campaña suave, con bosques y campos cultivados, en un contexto modelado por el hábil trabajo del hombre. Este se incorpora en el paisaje con sus cultivos tradicionales, sobre todo viñedos y olivos, respetando la importancia de un ambiente con sus pueblos antiguos y considerando su significado urbanístico e histórico.

Este lugar es perfecto para quienes aman el turismo relajado en la naturaleza, paseando y haciendo excursiones. Al norte domina el área protegida de Montalbano, un relieve formado por una densa red de caminos y recorridos para el senderismo. A los pies de la montaña, se extiende el Padule de Fucecchio, un área húmeda donde los observadores de pájaros pueden contemplar más de 190 especies e interesantes ejemplares de flora.

Esta amplia y variada zona ofrece seguramente numerosas actividades para cada tipo de visitante. La zona está atravesada por varios kilómetros por la Vía Francígena, que pasa por Castelfiorentino y Gambassi. En cambio, los amantes del arte pueden visitar algunos pueblos, como Capraia e Limite, Montespertoli y Montaione. En éste último se encuentra el característico convento San Vivaldo. Además, está también el museo dedicado a Benozzo Gozzoli en Castelfiorentino o las habitaciones de la villa de los Medici en Cerreto Guidi, patrimonio de UNESCO. Las colinas en Montalbano son las mismas donde nació Leonardo da Vinci, las cuales fueron pintadas por él en muchas de sus obras. Para intentar entrar en la brillante mente de este genio, se puede visitar el Museo Leonardiano, en Vinci. Igualmente interesante es el mundo de la artesanía, sobre todo en Empoli y Montelupo Fiorentino, este último famoso por sus cerámicas.

Excelentes son también la comida y el vino, con muchos productos propios de esta zona: desde la cebolla de Certaldo, al pan de Montaione, hasta los deliciosos quesos como el antiguo pecorino del pueblo Lucardo. Este terreno fértil para la producción de excelentes vinos y aceites, también ofrece verdaderos recorridos gastronómicos y vinícolas: el  "Camino del Aceite y del Vino en Montalbano - Colinas de Leonardo" y el "Camino del Chianti Montespertoli DOCG", basados en productos genuinos estrechamente relacionados con este territorio. 

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