Las Montañas de Pistoia se extienden desde el Alpe de las Tres Potencias hasta las laderas orientales de la Montaña La Croce, cerca del Bosque Acquerino. Geográficamente situada en el norte de Toscana, disfruta del apreciado tesoro de sus recursos naturales: la tranquilidad de los bosques, el aire fresco y límpido, los productos genuinos de su tierra, el esplendor de paisajes armoniosos y volubles. Además, las ciudades de arte como Pistoia y los numerosos pueblos históricos permiten alternar días relajados disfrutando de la naturaleza con interesantes viajes culturales.
Se distinguen fácilmente una parte norteña alpina y una parte oriental más armoniosa y típica de los Apeninos. La parte occidental está formada por dos cadenas montañosas paralelas, unidas por el famoso Paso del Abetone (1388 metros). Entre estas dos cadenas se encuentra el Val de Lima, rodeado de numerosos valles más pequeños, como el valle Sestaione, Verdiana, Limestre y Liesina. En cambio, la parte oriental se caracteriza por relieves con alturas que no superan los 1300 metros, montañas con perfiles redondeados y valles profundamente incisos por torrentes estrepitosos. Esta zona es famosa sobre todo por sus estaciones de esquí, frecuentadas por los deportistas toscanos y de otros lugares. Las pistas en Abetone y Doganaccia son muy famosas por quienes aman esquiar y practicar otros deportes invernales.
Sin embargo, el encanto de los Apeninos de Pistoia no se debe solamente a la nieve, en efecto, también en verano hay muchas actividades que se pueden realizar aquí. Las localidades en estas montañas son muy apreciadas para hacer senderismo: los itinerarios más interesantes son los del Monte Gomito, Monte Cimone y Libro Aperto, sin olvidar los sugestivos lagos Nero y Scaffaiolo.
Ovbiamente, lo que ofrece este lugar no se limita a la naturaleza incontaminada, hay además muchas posibilidades para descubrir curiosidades, la historia y las tradiciones. Para comprender mejor el vínculo que los habitantes tienen con estas montañas, aconsejamos seguir las etapas del Ecomuseo de la Montaña de Pistoia,que es un museo que se extiende por el territorio dividido en seis itinerarios temáticos. Cada uno brinda informaciones sobre las actividades de la vida cotidiana y los oficios antiguos como el de herrero, representado por las numerosas herrerías, algunas aún abiertas al público. Los que no sufren de vértigo y adoran la adrenalina pueden cruzar el indeclinable Puente Colgante de las Herrerías en San Marcello Piteglio, que en el pasado fue utilizado por los trabajadores que tenían que desplazarse de un lado al otro del valle.
No debes perderte los encantadores pueblos donde se encuentran bellísimas villas, fortalezas, torres empinadas y atmósferas medievales como Serravalle o Quarrata, así como la pequeña y liminar Pavana o Sambuca Pistoiese. Pistoia merece un capítulo a parte, , nombrada Capital Italiana de la Cultura en el 2017, ofrece muchos museos y el arte y la historia son tangibles en sus calles, plazas y la cultura se manifiesta a través de las numerosas iniciativas anuales, como el festival musical Pistoia Blues.